La losa era utilizada como un techo y estaba apuntalada por columnas. “Había tres chicos que estaban jugando aquí y se produce el derrumbe”, apuntó Albarracín en momentos en que inspeccionaba el lugar donde sucedieron los hechos. Uno de los chicos, llamado Maximiliano, perdió la vida en el acto al sufrir aplastamiento de cráneo. “Todo indica que los chicos estaban por debajo y no por encima, en el techo”, señaló el comisario. Las víctimas del derrumbe habían ido a buscar lombrices al predio.
En tanto, el otro menor de edad y el mayor fueron rescatados por vecinos, familiares, bomberos y personal policial. “Estaban aplastados completos. Lo que pasa es que tuvieron suerte por la pendiente en que quedaron las columnas. Las columnas hicieron de soporte pero corrían peligro de vida y cualquier movimiento que se realizase en falso para rescatarlos se derrumbaba toda la estructura”, explicó el Jefe de la Departamental de Policía.
La cancha de fútbol está vacía y no se utiliza para competencias oficiales desde hace décadas porque se encuentra en una zona inundable debido a que a corta distancia se encuentra el arroyo Yuquerí. Hace poco, los dirigentes del club Las Heras habían anunciado la recuperación del terreno de juego para volver a tener un estadio propio. Por ese motivo, algunas máquinas realizaron movimientos de tierra.
El Jefe de Bomberos Zapadores, Esteban Bonnet, aseguró que los movimientos de tierra efectuados por una empresa eran para tirar la losa y realizar una construcción nueva en ese lugar. “Era una estructura vieja, antigua y no se le estaba dando ningún tipo de uso al momento”, acotó. “Tiene que haber sido en un pasado una estructura tipo cantina o algo por el estilo”, expresó.
Los operarios de la empresa contratada para realizar los movimientos y voltear la estructura habían trabajado hasta cerca de las dos de la tarde, según los vecinos. El jefe de Bomberos señaló que el debilitamiento de los puntos de apoyo se habría producido por los movimientos efectuados por la empresa. “Después fueron los chicos a jugar o simplemente a curiosear”, señaló Bonnet.
Los dos heridos fueron un chico y un adolescente de aproximadamente 20 años. Ambos fueron trasladados al hospital Masvernat. Bonnet aseguró que el chico tenía varias heridas de consideración: aplastamiento de cráneo y excoriaciones múltiples. Al menos, sostuvo que no tenía fracturas expuestas y los síntomas que manifestaba no eran compatibles con los de alguna quebradura interna.
Al mismo tiempo, el jefe de Bomberos descartó que haya otra víctima bajo los escombros debido a que no se podía localizar a otro menor de edad. Los bomberos realizaron una remoción del material que quedó en el sueldo con ayuda de máquinas excavadoras y no hallaron nada.