Por otra parte, la jueza de Instrucción Marcela Badano dispuso incautar las nueve armas de fuego de los funcionarios policiales que intervinieron en el hecho; el secuestro de las vainas servidas; la extracción de sangre y un dermotest a todos los efectivos policiales.
La tarea investigativa quedó a cargo de la Dirección Criminalística que –con la presencia del jefe de la Policía, Héctor Massuh; la jueza Badano y los padres de algunos de los chicos– peritó el auto que sufrió al menos 14 disparos de arma de fuego 9 milímetros.
El caso ocurrió ayer a la madrugada, cerca de la 1.30, cuando los cuatro jóvenes compañeros de secundaria viajaban en un VW Gol por calle Churruarín en dirección a avenida Circunvalación y fueron tiroteados por policías, supuestamente por hacer caso omiso “a la voz de alto”. En los patrulleros viajaban cuatro policías vestidos de civil y en otros dos móviles cinco uniformados. Los efectivos buscaban a una banda de delincuentes que había cometido un asalto tipo comando en el comedor Rancho Grande, ubicado en el Acceso Norte, entre las calles Londero y Borges en Paraná. Al VW Gol rojo de los chicos lo confundieron con uno de los dos autos de la misma marca utilizados por los ladrones, pero color bordó.
Asalto y persecución
La historia, que afortunadamente no tuvo un epílogo trágico pero sí un nudo de extrema gravedad, comenzó cerca de las 0.30 de ayer cuando seis delincuentes armados y encapuchados, a bordo de una moto tipo enduro y dos autos –un Renualt 18 y un VW Gol bordó– irrumpieron en el comedor Rancho Grande. Allí, redujeron a unas 100 personas que se encontraban cenando y sustrajeron dinero, alhajas y celulares. Antes de darse a la fuga todos los comensales fueron encerrados en los baños. Durante el atraco dos personas resultaron con lesiones leves, ya que fueron golpeadas. Inmediatamente, gracias a que un mozo logró llamar a la Policía, personal de la comisaría séptima llegó al lugar. Desde la sala del Comando Radioeléctrico se ordenó la localización y detención de los ocupantes de los automóviles mencionados. Es así que personal de la Dirección Investigaciones ubicó un auto de similares características en calles Churruarín y Circunvalación. Se inició una persecución, ya que según informó la Policía los ocupantes no respondieron a la voz de alto. Aparentemente, en esta situación, personal policial efectuó casi 20 disparos contra el rodado, de los que al menos 14 habrían impactado en el Gol en el que se conducían los jóvenes.
