Los lectores de códigos de barras, guardados en un cajón del Ejecutivo

El 18 de abril de 2013 se presentó en el Concejo Deliberante un proyecto de ordenanza que contempla la colocación de lectores de barras en el hipermercado o supermercados que reúnan una cierta cantidad de metros cuadrados cubiertos. “A veces se cae el papelito donde está el precio, el cliente tiene que tener rápidamente la posibilidad de ir a una lectora y obtener el valor del producto”, indicó ese día el vicepresidente del Concejo, Mariano Giampaolo. A ello habría que añadir que muchas veces no hay carteles en las góndolas que identifiquen los precios.

La exigencia es que los comercios posean, al menos, un lector que le permita al cliente caminar hasta el dispositivo para saber con antelación a llegar a la caja cuanto vale. “Y no llegar y encontrarse con alguna sorpresa y terminar pagando cualquier precio”, explicaba Giampaolo, autor de la iniciativa.

En abril del año pasado restaba discutir en el cuerpo es la cantidad de metros cuadrados cubiertos necesarios y los niveles de facturación que obligarían a la utilización del sistema.

En mayo de este año, la situación es la misma. Por un lado, aún no se avanzó en la determinación de la cantidad de metros cuadrados adecuados para exigir la colocación de los lectores. “No sabemos si tienen que ser 30, 40 o 100 m² la superficie promedio que exijamos” dijo un edil que sigue de cerca el tema. El costo de cada máquina ronda los 8.000 o 9.000 pesos.

Por el otro, desde hace varios meses que el proyecto fue enviado al Ejecutivo para realizar las consultas de rigor y aún no ha retornado. En el Concejo desconocen la razón de la tardanza aunque ya están habituados a las demoras que afectan a ciertos temas.

El tema no es menor en momento en que la Nación extrema los controles para que se cumpla con el programa “Precios Cuidados” en todo el país. En Entre Ríos, el gobernador Sergio Urribarri, en su discurso de apertura de sesiones ordinarias de este año, hizo referencia al tema. Mencionó la necesidad de abogar por el “total y efectivo por el mantenimiento de los precios en la provincia”. “Estoy convencido que se trata de una acción esencial para que las corporaciones de formadores de precios no vuelvan a tomar el control de nuestras vidas a través de tomar el control del bolsillo de los trabajadores y de las familias entrerrianas”, señaló en esa oportunidad.

Por ello, anunció que el gobierno iba a poner todos los recursos para poder sostener esta barrera en la provincia. “Esperamos contar con el apoyo de las propias empresas comercializadoras y especialmente de la gente comprometiéndola en abstenciones de consumo si es necesario ante los abusos de precios y en la denuncia ante prácticas desleales”, señaló.

 

 

Entradas relacionadas