Se trata de causas judiciales desparramadas en prácticamente todos los juzgados de instrucción de la ciudad de Paraná. Jueces a los que Rovira se cansó de sindicar como poco interesados en investigar nada que pudiese afectar a Busti y a sus ex funcionarios.
Así, varias de esas causas están radicadas por ejemplo, en el juzgado del inefable Héctor Toloy ; en el de Héctor Villarrodona en el de la ex jueza de instrucción Susana Medina de Risso y Ricardo González entre otros.
Los pedidos fueron acompañados por varios de sus pares de bancada.
Es de suponer el escozor que estos pedidos deben haber producido en el seno del gobierno provincial y de varios funcionarios. El trámite debería seguir con el envío de ese pedido de informes a cada uno de los juzgados de referencia, es decir, los lugares en los que esas causas se encuentran, los jueces, se supone, no podrán eludir la respuesta, cada una de estas se hará pública y el debate sobre lo que muchos suponen archivado para siempre, puede volver.