“La idea está presente, no detiene un poco la cuestión de los chicos y todo el tramite que tenemos que hacer con gendarmería”, adelantó. “Además, como la causa no está acá en Concordia no nos van a dar nada de bolilla y nos van a terminar echando porque, si antes ni nos tenían en cuenta con todas las marchas que hacíamos acá, menos ahora que está en Corrientes. Lo que pasa es que estamos desesperados”, lamentó
No obstante, Duarte manifestó “sentirse mucho más tranquila” a partir de la asesoría del letrado quien consiguió que Gendarmería se involucre internamente en la búsqueda en Corrientes como así también, el apoyo del fiscal Ramos. “Jáuregui nos mantiene informada a las dos y se lo nota interesado en el tema y moviéndose como antes nadie se movió. Y eso para nosotros es una gran ayuda”, destacó.
Respecto a su consideración sobre lo que sucedió con Miño y Quintana, la mujer sugirió que la hipótesis más fuerte que manejan es la del robo y aseguró que se intensificó con la aparición de otros camionetas robadas. “Por fin se acordaron e incluyeron a los concordienses en la búsqueda y dentro de los otros robos”, remarcó Duarte. “Pero tampoco tienen nada seguro porque la realidad es que no tienen nada: ni un tiro en la camioneta, ni un choque, nada. Sólo un vehículo quemado”
Finalmente, la pareja de Quintana opinó que está segura de que la policía de acá supo siempre algo y que por alguna razón no se lo dicen. “Yo creo que ellos saben si hay o no pistas, si encontraron algo más o no y quizás, por la misma investigación no nos dicen nada”, señaló. “Pero estoy segura de que ellos saben algo porque fueron muchas cosas distintas las que nos dijeron desde el primer día y siempre hubo muy poco movimiento y todo raro”