“El departamento Ejecutivo dice que esto no va a generar mayores gastos, yo entiendo que sí. Son estructuras que se van formando dentro del municipio”, expresó. Ahora, las secretarías de Gobierno y Hacienda se desdoblaron; Gobierno por un lado y Hacienda por el otro. Lo mismo sucedió con Obras y Servicios Públicos. Ahora la municipalidad tiene siete secretarias: Gobierno, Hacienda, Obras Públicas, Servicios Públicos, Reforma y Control de Estado, Salud y Acción Social y Cultura.
En otro párrafo, el edil manifestó: “volvemos a las siete secretarías que tenía el ingeniero Orduna en su anterior gestión siendo que Cresto dijo que iba a reducir las secretarías para evitar dispendio, pérdida de tiempo y burocracia. Estamos volviendo casi a una estructura similar. Esto es no cumplir con la palabra empeñada durante la campaña”.
“Hoy los secretarios está ganando una enormidad. De acuerdo a lo que ello habían establecido por decreto y a los aumentos que de dio al personal de $ 50, ellos se fueron a $ 3.700”. Wdowiak también calificó a la cifra como “exorbitante”. Ahora, habrá dos nuevos secretarios: Daniel Martínez, quien asciende de subsecretario a secretario, y Álvaro Sierra, quien también se desempeñaba como subsecretario pero de Hacienda. El sillón de la secretaria de Reforma y Control de Estado aún está vacío.
El concejal aportó otro dato: el intendente gana $ 3.000. “Los secretarios ganan casi un 25 % más que el presidente municipal. Me parece una aberración, el intendente gana muy poco, el secretario gana demasiado”. A esto hay que añadirle las subsecretarías que se también se crean, aunque no en todos los casos. También se crearon dos direcciones.
“Todo esto implica mayor erogación en gastos administrativos que no se trasunta en los servicios que realmente tiene que recibir a la comunidad, que es la función que debe cumplir el municipio”, indicó el vecinalista.
Cuando se analice el presupuesto 2006, se tendrá una estimación del costo extra que implican estas modificaciones. “Lo vimos ya y es una cosa que advertí en su oportunidad cuando sancionamos el presupuesto 2005, donde advertí que en relación al 2004, había habido un aumento en materia de personal de $ 5.350.000”. El gasto en personal pasó de $ 21.200.000 a $ 2.570.000. Wdowiak admitió que hay gastos imposibles de evitar, como el rubro Antigüedad, pero aseguró que si esos cinco millones se hubiesen volcado en obra pública, en infraestructura de la ciudad, hubiese sido una suma muy importante.
Otro dato a tener en cuenta es que, si bien aumenta año a año el gasto en Personal, el porcentaje destinado a este rubro dentro del Presupuesto disminuye. Esto se debe a un aumento de la recaudación, tanto de las tasas que recauda el municipio como de lo que ingresa por coparticipación. “Lo que yo planteé es que, en un veranillo económico como el que estamos viviendo, tenemos que ser muy cautos en materia de gastos. Todo lo que se destine a personal queda fijo en los sucesivos presupuestos”, dijo Wdowiak. La idea era agotar el dinero extra en obras públicas. “En cambio, si yo destino $ 3 millones de pesos a Personal, el año que viene lo voy a tener que prever también porque eso es inmodificable”, finalizó.
