"Aunque ambos suponen que a lo mejor se puede prolongar sus detenciones, saben que no hay elementos en estas acusaciones como para sostener semejante detención y que se está cometiendo una injusticia porque deberían estar excarcelados como pasa en la mayoría de las causas por estos delitos", señaló a Radio Ciudadana. Además, Rosenblum explicó que el delito de traición a la patria ya no existe y sólo queda la acusación de encubrimiento, un delito excarcelable.
Además, dijo que ambos participaron en la lucha por los derechos humanos por distintas situaciones. “Hablamos de las dificultades por las que transcurre cualquier detenido en la cárcel”, indicó.
A Khalil lo ubicaron en un pabellón para presos de origen extranjero por el apellido. Es raro, indicó la mujer, dado que nació en el barrio de Floresta y es argentino al igual que su familia. “Sólo profesa la religión musulmana”, aclaró. En consecuencia, no entiende porque no puede compartir el mismo pabellón que Zannini.
Rosemblum explicó que la Liga realiza desde 1983 visitas a los presos políticos en las cárceles argentinas. “Después de dos meses de largas gestiones la obtuvimos”, indicó. La próxima semana irán a la penitenciaría de Marcos Paz para visitar a los restantes detenidos políticos. “La lista llega a 22 desde el momento en que detienen a Milagros Sala, hace más de dos años”, dijo. Los últimos fueron los detenidos en las manifestaciones de diciembre en contra de la reforma previsional de los cuales aún permanecen cinco en esa condición. Además, dijo que los que han quedado detenidos se debe a fotos que les han tomado en Congreso pero aclaró que se trata de un ámbito muy grande y hay casos en que fueron detenidos volvían de sus trabajos a sus viviendas.
“La Liga ha sostenido desde 2015 que se produjo un punto de inflación en las condiciones de este estado de derecho que tenemos. Hay un retroceso aunque siempre hemos sostenido que el estado de derecho no existe sino existe en la acción práctica; si el gobierno no respeta el derecho a pronunciarse en reclamo de las cosas que nos están pasando como pueblo, no hay estado de derecho aunque formalmente no estén suspendidas las garantías constitucionales”, argumentó.
“Parece que al gobierno de Macri le molesta más que cortemos el Metrobus que nuestros adultos mayores no tengan para solventar sus necesidades o que familias enteras vuelvan a la calle porque no pueden pagar un alquiler”, añadió.
“A diferencia de lo que establece nuestra Constitución, que todos somos inocentes hasta que se demuestre lo contrario, acá se invierte la prueba, pero en persecución política esto es la regla. Cuando se desparecía en dictadura a los compañeros el discurso era: ‘por algo será’,’en algo andará’, ‘son subversivos’, ‘son terroristas’, ‘son comunistas’ y ahora es ‘son corruptos’”, sostuvo.
Además, precisó que estaba preocupada por las noticias que hablan de la instalación de la DEA en la Triple Frontera. “Sabemos que eso conlleva una intervención directa del gobierno yanqui en nuestro país con la excusa del narcotráfico”, indicó.