Con el objetivo generar presión internacional sobre el presidente Enrique Peña Nieto (PRI), la "Caravana 43 Sudamérica" ya pasó por Córdoba, Rosario y culminó esta tarde sus actividades en Buenos Aires, antes de seguir rumbo a Uruguay y Brasil. Hilda Hernández, madre del desaparecido César Manuel González, integró el grupo de familiares que esta mañana comenzaron a marchar desde la embajada de México, en el barrio de Belgrano. "Yo sé que mi hijo está vivo junto con sus compañeros", sostuvo en un breve diálogo con la prensa, y no descartó que hayan sido secuestrados para someterlos a esclavitud en el cultivo de drogas.
La mujer dijo que todos los familiares de los estudiantes tienen "rabia" y "coraje" contra el gobierno mexicano, a quien responsabiliza por lo ocurrido con sus hijos y por la situación general de violencia en todo el país.
Hilda Hernández; su marido, Mario César González; la madre de Jorge Antonio Tizapa, Hilda Legideño, y el sobreviviente de la tragedia, Francisco Sánchez Nava, fueron acompañados por varias decenas de representantes de organizaciones sociales y políticas.
Durante la marcha, el sobreviviente del ataque a los estudiantes normalistas del 26 de septiembre, Sánchez Nava, denunció la actuación de un gobierno "corrupto" y "asesino" que funciona como un "narcoestado" y relató que aquella noche, cuando se acercaron las autoridades, les dejaron claro que eran estudiantes y pidieron que los dejaran ir, pero los dispararon y "masacraron" a tres de sus compañeros porque "así es el terrorismo de Estado en México".
La marcha fue la última actividad de la recorrida por la Argentina, que comenzó por Córdoba y siguió en Rosario, y que continuará en Uruguay y Brasil. El periplo por Buenos Aires comenzó el sábado por la noche, en un encuentro con organizaciones defensoras de los derechos humanos y sociales realizada en el espacio Pañuelos en Rebeldía, en el barrio de Nueva Pompeya.