Vestían uniformes similares a una fuerza de seguridad brasileña y en el asalto dispararon más de 50 balazos, según declaraciones del concejal municipal Neco Schwarz.
"Me encontraba a una cuadra del banco -contó el funcionario- cuando se armó la balacera. Corrí y hallé en la vereda al policía, estimo que muerto de un disparo en la espalda". La Comisaría de El Soberbio confirmó que se trataba del cabo primero Roberto Ballestero.
El policía, quien trabajaba como guardia externo de la entidad, recibió un tiro mortal en la espalda durante un enfrentamiento en la calle con los asaltantes.
Los delincuentes se fugaron en una camioneta con patente del Brasil por una ruta misionera que vincula a aquella población con Colonia Alicia, por donde eventualmente volvieron a cruzar el Uruguay para internarse en campos y montes del vecino país.
En cuanto a Miguel Escudero (55), suboficial de Gendarmería Nacional que también se tiroteó con los ladrones, recibió un impacto en la cabeza y fue trasladado de urgencia al hospital Samic de Oberá. Su estado es sumamente grave, informaron los médicos, que tratan de salvarlo mediante una operación quirúrgica para extraerle el proyectil.
En el violento asalto se habrían utilizado al menos 4 fusiles automáticos livianos (Fal), una metralleta y una escopeta.
Al conocerse la información, fuerzas de seguridad federales y de la Policía de Misiones pusieron en marcha una suerte de "operativo cerrojo", controlando rutas provinciales y nacionales, al igual que caminos vecinales terrados.
En tanto desde Posadas viajan efectivos de Grupo de Operaciones Especiales, al mando del comisario general Flavio Sosa.
Los asaltantes actuaron a cara descubierta; el policía fue directamente fusilado, de acuerdo a comentarios de clientes del Banco Macro de El Soberio. El lugar se encuentra ubicada en una zona donde se cultivan aceites esenciales, hay varias fábricas de maderas y excursiones a los Saltos del Moconá. No obstante, la principal fuente de ingreso del lugar es el contrabando de todo tipos de productos, incluidas drogas ilegales.
Como la mayoría de las fronteras misioneras, está fuera de control de las autoridades, lo que aumento la preocupación del resto de los habitantes de esta provincia, donde se suceden diariamente graves hechos criminales.
