La marcha, convocada por la Asociación de Entidades Intermedias de la ciudad, se concentró primero frente al palacio municipal, adonde un pequeño grupo pretendió ingresar para presentar sus reclamos a la intendenta Sandra Sánchez.
Minutos después, la multitud caminó hasta la jefatura departamental de Policía, de donde salieron, con la aparente intención de dialogar con la gente, el jefe departamental Elio Acosta, el subjefe Fernando Alsina; y un funcionario que la Jefatura Central delegó en Villaguay para “poner en orden la situación”, el comisario mayor Amancio Cosso.
Como nadie había previsto la necesidad de un megáfono, el dialogo resultó imposible y algunos sectores de la muchedumbre comenzaron a insultar a los funcionarios policiales. Incluso, hubo quienes se acercaron a Cosso para manifestarle su malestar con el funcionamiento de la fuerza de seguridad en la ciudad.
Luego, los manifestantes se corrieron hasta la puerta de Tribunales, donde cuestionaron el trabajo del juez Carlos Zaburlín. Y como el magistrado no se encontraba allí, algunos ciudadanos caminaron hasta su casa, ubicada en la avenida Leopoldo Herrera.
