La Sociedad Rural de La Paz expresó su disconformidad frente al aumento del Impuesto Inmobiliario Rural, y advirtió que “la situación del sector, gracias a las políticas aplicadas por el Gobierno, es terminal en muchos productores y sumamente complicada en el resto del sector”.
“Habiendo comenzado la trilla de la cosecha gruesa todavía hay trigo sin vender por no haber precio y de haberlo es terriblemente inferior a lo que el Gobierno dice que tendría que valer. Con respecto a la trilla de la cosecha gruesa, el incremento de todos los costos hace que nuevamente digamos que el 35 % de retenciones sobre la soja es insostenible sobre todo para los productores chicos y medianos, y de igual manera para el maíz, girasol y otros cultivos”, sostuvo la entidad que preside Gustavo Álvarez. Acerca de la carne, La Rural paceña recordó que “hace años dijimos que esta situación iba a pasar” ante la “liquidación de stock por falta de rentabilidad, con el consiguiente aumento del precio en el mostrador y desaparición de productores”.
“En lo local pagamos un impuesto para transitar sobre caminos en muchos casos intransitables, con una Dirección Provincial de Vialidad que posee maquinarias obsoletas y una cantidad menor a la que se necesita para tener una red vial productiva en condiciones”, cuestionó la entidad.
Bajo estas condiciones, “¿no les da vergüenza seguir sacando leche de la misma teta? Es hora de pensar que el campo no da más de tapar los agujeros de la caja, que se ocasionan por desmanejo excesivo, gasto público y corrupción”, finaliza el comunicado la Sociedad Rural de La Paz.