“De buena voluntad y sentido común podríamos llegar a un arreglo. Hemos puntualizado todos los problemas de los vecinos porque no solamente son las calles, hay problemas de agua, de cloacas”, dijo Emilio Negri, un vecino de calle Gualeguay.
Negri aseguró que se necesita una solución para un sector de más de 2000 metros de longitud que no tiene calles de acceso directo. “Creo que va a primar el sentido común y vamos a llegar a un arreglo”, señaló Negri, sin privarse de indicar que, de no arribar a buen puerto, se podría entrar en otras situaciones que: “no nos hace bien a nadie”.
Por su parte, Zadoyko indicó que estaba de acuerdo con el planteo de abrir la calle Hermana Clara para que los vecinos no deban hacer un rodeo largo hasta llegar a Monseñor Rösch. Para ello, se requiere la donación de una parte de los terrenos que pertenecen al emprendimiento de un barrio privado denominado “Los Altos del Zorraquín”.
En tanto, el vecino dijo: “hemos planteado que no quisiéramos que se toque el cauce del arroyo Ayuí porque ahí la calle sería impracticable y que la gente del country ceda y se pueda llegar a un acuerdo”, señaló el vecino, citando lo que sucedió en La Plata como antecedente. “Si vemos lo que pasó en La Plata nos damos cuenta que alterar lo que la naturaleza nos brindó nos trae complicaciones muy severas, muy graves. No avancemos sobre el arroyo Ayuí”, pidió. No obstante, Zadoyko no lo ve de igual forma. Por ello, dijo que prefería que se lleve a cabo la apertura tal como está en los planos y luego analizar que sucede. “Es cierto, hay una parte que estaría sobre el arroyo”, admitió.
Por otra parte, Negri señaló que muchos vecinos no tienen agua potable y están sacando el líquido de napas “muy superficiales con los problemas que trae esto de salud”. En cuanto a la iluminación, señaló que Gualeguay, desde Vuelta de Obligado hasta Las Palmeras, no hay luminaria alguna. “Hay chicos que van a la escuela, personas grandes que para tomar el colectivo tienen que hacer 2000 metros porque no hay ninguna calle que una Gualeguay con Monseñor Rösch”, indicó. Asimismo, destacó que para una zona turística, tal como se proyecta la zona, se necesita cuestiones básicas como calles en buen estado, seguridad e iluminación.
En tanto, el edil de Villa Zorraquín recordó que el tema de la iluminación fue planteado el jueves pasado, en una reunión mantenida en la zona entre vecinos, concejales y funcionarios del Ejecutivo. Entre éstos últimos estaba el secretario de Obras Públicas, Luis Benedetto, quien sólo dijo que “estaban trabajando en eso”. Calle Gualeguay, cuando sea asfaltada porque ahora es de ripio en su totalidad, es mencionada como una posible alternativa para el tráfico hacia el norte para descomprimir Monseñor Rösch.
Respecto del agua, Zadoyko sostuvo que, con anterioridad, presentó un presupuesto en la municipalidad para la extensión del tendido de la red. Del servicio se encarga la cooperativa de agua del barrio pero con recursos propios no puede hacerse cargo de costear las cañerías ni la sala de bombeo para llegar hasta esa zona. “Lamentablemente algunas familias tienen perforaciones de cuatro metros, la misma que un pozo negro. Al no tener el servicio de cloacas, imaginate el grado de contaminación”.
