Geist cubrió la marcha y remarcó que fue de carácter apolítico. “Es la primera vez que una manifestación genuina del pueblo. Había una horizontalidad jerárquica ya que no había líderes”, dijo. Los dos vecinos que convocaron a la manifestación son: un mecánico y el propietario de un minimercado. De esa forma, desmintió que la organización corrió por cuenta de la oposición. Los concejales radicales no participaron de la marcha y optaron por dejar un petitorio.
“La concentración comenzó en el tanque donde está el núcleo central de todo este problema”, dijo Geist. Al principio había cerca de 250 personas. Abreu concurrió al lugar donde se concentraron los vecinos acompañado por el Jefe de la Departamental de Policía, Sergio Mendoza, y una custodia de cuatro efectivos. Alcanzó a dialogar cerca de 15 minutos pero los más exaltados comenzaron a gritar: “¡Mentiroso! y ¡que se vaya!”. En ese interín, les pidió un plazo de 15 o 20 días para que puedan perforar los pozos nuevos. “Pero los vecinos hace tres años que están sin agua. Hace tres temporadas estivales que vienen sufriendo y están pidiendo soluciones inmediatas”, recalcó Geist
Abreu, cuando observó el descontento general, decide retirarse pero dos o tres vecinos se interpusieron cuando se iba a subir al auto y le “gritaban de todo”, remarcó el periodista federaense. Luego se trasladaron por la calle principal y mucha gente se fue sumando. “La mayor parte de la gente es de los barrios porque en el centro tienen agua pero el problema está en los barrios. El comercio no acompañó tanto sino los principales afectados”, explicó.
“Más o menos 500 o 600 personas estuvieron a punto de ingresar al complejo termal”, dijo Geist. Pero una línea de 9 policías de civil se formó detrás de una reja ubicada en la puerta y se los impidió. “Hubo algunos gritos de vecinos que querían entrar a las termas pero cerraron las rejas y no dejaron entrar a ese grupo”. La idea de los manifestantes era bañarse en las termas. Los vecinos habían convenido en llevar jabón y toallas para ese fin.
Antes de desconcentrarse, los vecinos dialogaron acerca de realizar una nueva manifestación dentro de un lapso indeterminado. Mientras algunos proponían entre siete o diez días debido a que Abreu alcanzó a señalar que iba a tratar de mejorar el servicio en 72 horas, otros optaban por 20 días, el tiempo que insumirá la perforación de los dos pozos. Finalmente, quedaron en comunicarse por los medios para confirmar el día y la hora.
