En el cónclave estuvieron presentes el vicegobernador Pedro Guillermo Guastavino; y el ministro de Gobierno, Sergio Urribarri. Varisco ingresó al Salón de Acuerdos a las 9.15 y salió una hora después.
Momentos antes de hacer su ingreso, Varisco adelantó que la invitación tenía como fin discutir temas de la realidad provincial. El radicalismo está preocupado por la situación del Banco de Entre Ríos (BERSA), la distribución de energía y cuestiones relacionadas con la salud, educación, seguridad, aspectos institucionales y la reforma política.
Aunque Busti sabía sobre el pronunciamiento negativo del congreso radical, Varisco reconoció que el gobernador, de igual modo, le planteó el tema de la modificación de la Carta Magna provincial.
Varisco se limitó a expresar la resolución partidaria sobre el tema, aunque sugirió que “otro congreso podría variar la postura expresada el 5 de marzo pasado”.
Otro rechazo
Luego fue el turno de Emilio Martínez Garbino. El referente máximo del Nuevo Espacio reiteró la postura de su agrupación de rechazo a la manera que se está manejando la reforma de la Constitución Provincial.
Según Martínez Garbino, “es una falacia decir si a la gente le interesa la reforma o no, porque nadie pone en duda la necesidad de mejorar la calidad de las instituciones y que uno de esos caminos es la reforma de la Constitución, pero cómo se lo quiere hacer es otro cantar”, dijo, tras el encuentro mantenido en el Salón de Acuerdos de la Casa Gris.
Más adelante, el referente del Nuevo Espacio remarcó que “el debate tiene que ser sobre cómo se hace la reforma: o se hace en serio o no se hace. Pero creo que en este momento, la discusión debe pasar por la educación, la salud, la seguridad. Hay que hablar en serio de estos temas, que son los que les interesan a la gente. Pero la cuestión de la reforma está teñida de sospechas y dudas, hay que apostar a la credibilidad, y con una confianza en serio podamos hablar en serio de estos temas”, sentenció.