En declaraciones efectuadas en el programa “A quien corresponda”, Varisco habló de la necesidad de la reforma de la Constitución y afirmó que “fue clara la posición de los diputados la semana pasada y se va a mantener este miércoles” y subrayó que “la decisión de prolongar el tema con un cuarto intermedio fue del oficialismo, pero se podría haber votado y terminado el tema allí”.
Consultado sino teme que algún factor lo sorprenda en la próxima sesión, contestó: “Creo que no hay motivo para temer una sorpresa en ese sentido”. Considerando que el ex gobernador, Sergio Montiel, reapareció en la escena política y opinó sobre la reforma de la Constitución, por lo cual algunos hombres del montielismo podrían cambiar de parecer en cuanto a la postura que la UCR ya tomó sobre el tema, Varisco admitió: “Hubo manifestaciones de algunos dirigentes en las últimas semanas, pero el radicalismo tiene fortalecida su institucionalidad y lo único que puede hacer es cambiar su postura en un nuevo congreso”.
En ese orden, insistió: “No veo alternativas no posibilidades de sorpresas individuales”, al tiempo que acotó que “terminó una etapa, el gobierno se equivocó y la reforma se frustró por la incapacidad del gobierno de establecer un diálogo respetuoso con toda la sociedad, no sólo con la oposición, y no transparentar que su verdadero objetivo era la reelección”.
“Quedó claro, incluso en la campaña electoral, que el móvil era la reelección”, remarcó Varisco, quien aseguró que “no creo que estén dadas las condiciones ahora para que exista un nuevo Del Real”.
No todas son rosas
En otro orden, se refirió a las duras críticas que efectuó el presidente del Comité Nacional de la UCR, Ángel Rosas, quien cuestionó a la nueva conducción del bloque de diputados nacionales del partido y destacó: “Creo que se equivocó en sus apreciaciones porque no es un radical más, ya que lleva cuatro años interrumpidos como presidente del Comité Nacional, fue dos veces gobernador de Chaco, incluso sosteniendo un discurso muy crítico y opositor al kirchnerismo”. De todos modos, ratificó que con la carta que hizo pública “se equivoca, porque debería entender que los legisladores son pares y que él perdió la pulseada para lanzar una candidatura para presidir el bloque, que nunca terminó de lanzarla. Las pulseadas para presidir un bloque son cuestiones que no tienen gran importancia, por lo cual creo que magnificó el tema. Quiso mostrarse como víctima y lo único que pasó fue que de 41 legisladores nacionales del radicalismo, 29 eligieron otro camino”.
