Un video institucional ya sacó varias sonrisas y desempolvó recuerdos cuando tomó el micrófono el presidente y escuchó que le preguntaron qué imaginaba en otra actualización del libro dentro de 20 años. “Los hinchas de River me piden ganar la Libertadores y me recuerdan que fuimos a Japón. Ahora vamos a ir a Abu Dhabi, porque vamos a ganar la Copa y vamos a ir al Mundial de Clubes”, avisó el hombre que en tres años bajo su conducción le dio al club cinco de los diez títulos internacionales que tiene.
A tres semanas del estreno de la Libertadores ante Independiente Medellín y justo antes de ingresar a la reunión con Alario y su representante, D’Onofrio fue consecuente con lo que manifestó el día después de ganar la Copa Argentina, otro momento de incertidumbre porque Gallardo había puesto en duda su continuidad. Y el máximo dirigente millonario le dio sustento a su optimismo: “Si no tuviera la fe, no vendría acá ni iría a ningún partido. Creo en los jugadores y en el cuerpo técnico para que nos den una alegría”, agregó.
D’Onofrio volvió de un viaje por Estados Unidos que no le impidió estar informado. Dio su mirada sobre la situación de la AFA y el regreso del fútbol el 3 de marzo, dijo que es una necesidad que vuelva a rodar la pelota, chicaneó y elogió a los periodistas por tener que comentar amistosos con pecheras (“los leo y veo a todos”) y hasta sonrió porque Independiente y Temperley no se pusieron de acuerdo por el resultado de una práctica. Pero tenía algo más que decir sobre su presagio: “No es fácil ganar la Libertadores. En la que ganamos nosotros, pasamos por un montón de situaciones. Es una competición compleja y difícil, pero repito: tengo confianza en el cuerpo técnico y en los jugadores”.
