El domingo se dio a conocer un informe que revela que Federación es el departamento donde menos se vacunó en Entre Ríos. Apenas el 13,03% de los habitantes recibieron al menos una de las dos dosis. En términos concretos menos del 13,03% de los 84.769 habitantes del departamento fueron vacunados. Chajarí, como parte de las localidades del departamento, está afectada.
Desde el gobierno municipal aseguraron que buscaban revertir esta situación para, además, evitar el confinamiento. Galimberti anunció que enviaba un proyecto de ordenanza al Concejo solicitando autorización para destinar 10 millones de pesos de recursos municipales para que el gobierno provincial compre vacunas para los chajarienses.
Pero, en la sesion del miercoles pasado, la oposicion no acompaño el proyecto que había sido presentado para ser aprobado sobre tablas. De inmediato, el Ejecutivo salió con un comunicado. «Los concejales del Frente Creer no acompañaron el proyecto en la sesión de hoy y presentaron uno alternativo que autoriza al Municipio a realizar gestiones de compra», se manifestó.
¿Que fue lo que sucedió? Salvat explicó que el proyecto del Ejecutivo pasó a comisión ya que la oposicion presentó una alternativa. «El intendente, a viva voz, está siempre jactándose de que el municipio está muy bien económicamente y que las arcas están muy bien paradas», dijo. En consecuencia, para agilizar el trámite, desde el bloque opositor pidieron que el dinero para la adquisición de vacunas salga directamente de las arcas del municipio. Pero tampoco prosperó la iniciativa opositora y también pasó a comisión. Salvat sostuvo que el miercoles proximo uno de los dos proyectos se va a aprobar. De hecho, indicó que el oficialismo tiene los numeros suficientes como para aprobar por sí solos el proyecto del Ejecutivo. «Si lo quieren sacar, lo van a sacar», dijo.
Galimberti recalcó que no puede llevar adelante la alternativa de la oposición. «Esto no es factible, ya que el artículo 6° de la Ley N°27573 sólo autoriza la adquisición a las Provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires», se señala a través de un comunicado.
Pero Salvat explicó que lo que proponen es que el municipio haga la transferencia de los $ 10 millones para que la Provincia disponga del dinero. Por ende, la adquisición sería mas rápida que esperar a que llegue el dinero de la coparticipación.
Más adelante, el intendente chajarisense señaló que la decisión de los ediles de la oposición dilata el tratamiento de la decisión. «En emergencia el Ejecutivo Municipal siempre actuó con la premura que la situación exige. No ocurrió lo mismo con las decisiones que se tomaron a nivel nacional y provincial y tampoco ocurrió con la postura adoptada por los concejales de la oposición», indicó.
En ese punto concreto, los ediles del Frente Creer dejaron en claro que no se niegan a la compra de vacunas, «tal como dicen todos los canales de comunicación oficial del Gobierno de Chajarí». «Por el contrario estamos de acuerdo y celebramos que el intendente tenga la decisión política», alegaron.
E, incluso, le recordaron que puede hacer uso de la autonomía municipal, tiene una nueva oportunidad haciendo uso de esta facultad legal, para que esto no termine siendo una simple “puesta en escena”.
Salvat remarcó que celebran que el intendente se haya dadoo cuenta que «la pandemia existe» y que se necesita el aporte del municipio para combatirla. «Nunca vamos a estar en contra de la compra de vacunas», señaló. «No nos perdonaríamos no estar a favor», remarcó el edil.
«Creemos que el intendente no quiere hacer política con esto», dijo Salvat. No obstante, en Chajarí se vivieron diferentes situaciones que generaron mucha polémica por el manejo de la pandemia el año pasado. La más recordada fue lo sucedido el 21 de septiembre del año pasado cuando, apenas pasadas las doce de la noche del domingo, una multitud de alumnos de diferentes escuelas se aglutinaron en las calles céntricas para realizar las celebraciones y para desafiar los controles de aislamiento obligatorio. La fiesta de los adolescentes se llevó a cabo el mismo día en el que las autoridades de la región declararon a Chajarí zona de transmisión por conglomerado.
En diciembre, la municipalidad de Chajarí anunciaba por las redes sociales que tomaron la decisión de habilitar eventos masivos como las fiestas del 24 y 31 de hasta 1.500 personas, recitales y recepciones con protocolos y pautas de cuidado responsable. La directora del hospital, María Fernanda Lalosa, de inmediato criticó esa decisión. “Somos lo que hacemos frente a la pandemia y el intendente debiera velar por la Salud, no tratando de que se enfermen las personas de una comunidad”, expresó. “Galimberti no sabe qué decir, en realidad, porque sabe que está mal hecho y le interesa más lo político que la Salud”, señalaba Lalosa. El argumento de Galimberti consistía en asegurar que prohibir los eventos significaba alentar las fiestas clandestinas.
Salvat, al recordar esos hechos, dijo que celebraban el cambio de actitud y que esperaba que el intendente siga en ese camino. De hecho, dijo que los desencuentros con el hospital y con las autoridades de Salud de la Provincia quizas lo hayan hecho rever sus actitudes y cambiar su postura frente a la pandemia. Por ello, para refrendar esa posición, dijo que esperaba que se apruebe el proyecto alternativo para que no se demore tanto la llegada de las vacunas.
