Munidos de cacerolas o banderas, llevaron adelante la movida, que incluyó la entonación del Himno Nacional Argentino y la permanencia durante algunos minutos en el mencionado espacio público. Luego se desconcentraron sin problemas.
Dentro del público presente se pudo observar a dirigentes (aunque no necesariamente hayan ido en “representación de”) de la Sociedad Rural o el Centro de Actividades Económicas, además de algún que otro concejal de la oposición. Hubo, además, un llamativo número de adolescentes que se sumaron a la protesta.
DIARIO JUNIO pudo charlar una vez concluida la movilización con algunos de los participantes, y en la mayoría de ellos percibir un desánimo generalizado por la falta de adhesión de la ciudadanía “que se viven quejando todo el tiempo, pero que cuando tienen la posibilidad de protestar, se borran”.
