El decano dijo que la deserción es un problema bastante complejo que no obedece a una sola razón. “Desde ese punto de vista, podemos colaborar en el esfuerzo que el nivel medio ya de por sí realiza”, señaló.
En octubre, el proyecto sería presentado ante el Consejo Superior de la UNER y en noviembre ante la Secretaría Nacional de Políticas Universitarias. “Ahí tendríamos una respuesta definitiva”, dijo.
“Este es un viejo anhelo de nuestra institución: el poder tener una escuela secundaria dependiente de la facultad. Y ha surgido esta posibilidad, se la está trabajando por iniciativa del Rectorado de la UNER. Lo estamos trabajando porque existiría una posible fuente de financiación que todavía está a confirmar para iniciar el año que viene una escuela secundaria”, indicó.
El establecimiento educativo tendría dos orientaciones: técnico de programación y técnico de procesos industriales, ambos de nivel secundario. No dependerá del Consejo General de Educación (CGE) sino que sería administrado en forma conjunta entre las Facultades de Alimentos y Administración. Funcionaría en las instalaciones de la UNER en horario matutino y se piensa en comenzar con dos cursos, uno para dada orientación, de 30 alumnos cada uno que deberían ingresar por sorteo. Los profesores y el personal de administración ingresarán por concurso.
“Este colegio viene a sumarse al nivel de enseñanza medio ya existente en nuestra ciudad. La característica diferencial que tendría es que dependería de la universidad aprovechando su infraestructura y sus recursos humanos aprovechando el nivel de enseñanza que sólo puede ofrecer una universidad”, manifestó el rector.
“Tendría todas las connotaciones de exigencia que una universidad exige en todos sus niveles. Ya de grado, pregrado, posgrado e incluso secundario”, dijo. “Se podría hacer un aporte a este plan del gobierno nacional que está impulsando desde hace algunos años para tener una masa crítica mayor en relación a la formación de técnicos e ingenieros”, añadió Teira.
El proyecto contempla la creación de otra secundaria en Oro Verde, dependiente de la Facultad de Bioingeniería y Agronomía. Además el decano dijo que en el país hay muchas secundarias que dependen de universidades. “Tienen una muy buena imagen y en general la gente las conoce y reconoce por su nivel de calidad”, argumentó.
Por último, dijo que deberán trabajar rápidamente en estos meses que quedan de 2014 debido a que el tiempo corre rápidamente. “Y no tenemos mucho tiempo disponible”, indicó.