Una nena de apenas 12 años tuvo una hija hace menos de tres semanas en el hospital Santa Rosa de Chajarí. El caso reviste cierta particularidad, ya que la jovencita tiene una muy leve discapacidad, pero habría accedido a consumar el acto sexual que le deviniera en un embarazo. Sin embargo, el padre de la criatura, por este hecho, está preso, ya que a tan corta edad, por más que haya habido consentimiento por parte de la menor, se considera como un acto de “violación”, en rigor, estupro, según explicaron fuentes judiciales. La joven, hasta ayer jueves, permanencia internada en el hospital al cuidado de agentes de salud. La recién nacida está en buen estado de salud.
Aun así, el tema no es más que un disparador que sirve para el análisis de una problemática que varios profesionales han coincidido en señalar como “muy preocupante”: la gran cantidad de embarazos en jóvenes de muy corta edad y de estratos socioeconómicos de bajos recursos en Chajarí y la zona. Aparte de la directora del nosocomio, médicos ginecólogos y obstetras locales consultados admitieron lo “preocupante” del problema, máxime teniendo en cuenta que “ha venido en aumento” de forma alarmante. “Hoy tenemos cerca de 10 casos de mujeres de entre 13 y 14 años embarazadas”, aseguró una profesional del área. “La totalidad de los casos se producen en hogares de bajos recursos”, agregó. Pero como contrapartida, reconocieron que “se esta trabajando” desde diferentes ámbitos relacionados con la salud en la elaboración de una estadística o relevamiento de casos de esta índole, para encarar una posterior campaña de prevención al respecto.
