
Para evitar un golpe de calor, hay que seguir varias recomendaciones.
-Evita la exposición al sol en las horas centrales del día (de 12 a 17 horas) y, en general, evita exposiciones prolongadas o dormirte al sol.
-Si notas cansancio o mareo, retírate a un lugar fresco o ventilado y aflójate la ropa.
-Pasa tiempo en locales con aire acondicionado. Si dispones de él en casa, acuérdate de bajar la temperatura por la noche, porque el cuerpo se enfría durante el sueño.
-Cúbrete adecuadamente la piel, la cabeza y los ojos con ropa, sombreros o gorros y gafas de sol. Esto te ayudará a prevenir tanto los golpes de calor como las quemaduras.
-Consume abundantemente agua, líquidos y bebidas isotónicas.
-Evita las comidas pesadas de difícil digestión que hacen aumentar la temperatura interna.
-Lleva ropa ligera que permita la transpiración, el principal mecanismo de refrigeración de nuestro cuerpo.
-Presta especial atención a los ancianos y niños. En concreto, los niños menores de tres años no deben exponerse al sol.