En su carta, Ana María Martínez, DNI 17.476.984 ; domiciliada en calle Paysandú 435 de la ciudad de Colon Entre Ríos, cuenta que “a la madrugada del 1 de agosto mi hija presentó un cuadro de intoxicación con los siguientes síntomas: fiebre (más de 39 grados), vómitos y deshidratación. Luego de que la viera el Doctor Juan Bidal quien conoce sus características físicas (mi hija Violeta convive con una parálisis cerebral desde su nacimiento conocida como cuadriparesia distónica, y con epilepsia parcial sintomática), fue trasladada de urgencia a la Guardia del Hospital San Benjamín de nuestra Ciudad por dicho médico, donde ya la aguardaban su pediatra Carlos Leonardi y su neuróloga María Ester González.
Martínez, cuenta que su hija “Presentaba un grave cuadro de deshidratación, con el consecuente diagnostico de intoxicación por ingesta de un lácteo alojándose la bacteria lactobacilo en sus pulmones con el consiguiente peligro de neumonía, poniendo en riesgo su vida”.
“Mi hija estuvo bajo cuidados intensivos, canalizada y con oxígeno en la sala de guardia hasta lograr su estabilidad mínima y ser trasladada a la sala de pediatría del mismo Hospital donde quedó internada varios días”.
Sigue señalando que “la intoxicación sufrida fue como consecuencia directa de la ingesta de un “alfajor helado marca Fresh Cream” el que fuera comprado el día 31 de julio de 2005 en el supermercado 207 de domicilio San Martín y Gral. Paz de Colón, el cual se encontraba vencido. Artículo éste que estaba exhibido para la venta con la leyenda CONSUMIR PREFERENTEMENTE ANTES DEL 30/03/05 lo cual no fue percibido por mí, confiando en la buena fe y en la buena calidad que ofrece este comercio a sus clientes, sobreentendiendo que protege a los consumidores.
Al final, señala “como profundo y sincero, nuestro repudio a la actitud del propietario del supermercado 207”.
Y sigue, “Como no todas las personas son iguales, cabe destacar la otra cara de la moneda de este hecho tan despreciable y es la calidad y calidez que encontramos mi hija, yo y toda nuestra familia en el equipo médico y de enfermería de las Salas de Guardia y Pediatría del Hospital San Benjamín, a ellos, nuestras ¡¡¡muchas gracias!!! Llenas de afecto profundo y sincero.