Un tilde ‘no es un certificado de defunción’

Chiappa dijo que Bukténica señaló, a su vez, en los medios que se había adulterado un certificado de defunción de la bebé lo que “habría facilitado posteriormente la sustracción”. “Este documento lo llena el médico obstetra, el que atiende el parto”, indicó. Pero Chiappa dio cuenta que el martes pasado, el querellante ya no hablaba de certificado de defunción sino que se habría adulterado la carta perinatal.

La asesora legal dijo que la madre de la bebé salió del nosocomio con la menor viva. En consecuencia, “no existe un certificado adulterado”. Por lo tanto, Chiappa dijo que es una afirmación “falsa y hasta temeraria”. Además manifestó que la historia clínica secuestrada por la Justicia “habla de un nacido vivo y no tiene ningún error”.

En Wathsapp circulan fotos de documentación hospitalaria aparentemente adulterada. “No sé quien la ha puesto a circular” dijo Chiappa, pero aclaró “no es esto”, señalando un certificado de defunción en blanco. En la conferencia, los participantes dedujeron que lo que Bukténica tiene en su poder es una carta perinatal. “Lo que presentó habrá sido lo que se lleva en la cartera la madre”, dijo Graciela Aracama, jefa de Maternidad. Las cartas o carnets perinatales son los que se le entregan a la madre desde el primer mes de gestación y son considerados como “documentos informáticos” y no revisten el carácter de “documentos públicos” como la historia clínica.

La asesora legal negó veracidad al relato acerca de que la abuela de la menor se acercó hasta el hospital a pedir leche y que allí se la negaron aduciendo que había fallecido. A lo cual la mujer pide un certificado y alguien lo saca de una computadora y se lo entrega. “Eso no es verdad: nadie saca acá de una computadora un papel”, arguyó.

“Acá vienen madres solas a tener familias y los médicos advirtieron en esas mamás y en los familiares preocupación”, dijo la asesora legal. Y atribuyó “desconocimiento e irresponsabilidad” a Bukténica por haber mencionado un certificado de defunción en un primer momento y un carnet perinatal luego. “Por eso afirmo que sus afirmaciones han sido temerarias e intencionales”, dijo Chiappa. “Que es lo que persigue con eso, no lo voy a evaluar. La Justicia luego nos va a decir que es lo que intentó perseguir”, dijo.

En la conferencia de prensa estaban presentes, además de Lemos y Chiappa, el director del nosocomio Miguel Ragone,  la jefa de Maternidad, Aracama, Lemos y Julieta Acha y Veronica Saporittis, del servicio de Obstetricia. Ragone dijo que querían llevar a la población “tranquilidad” (en el hospital se atienden 3.000 partos por año) dando a conocer la forma en que se maneja la maternidad. En ese sentido, señaló que les ha llegado la “inquietud” de muchos pacientes que se acercan con “cierto temor” a raíz de la difusión del caso en la prensa.

En tanto, Lemos dijo que por lo que la prensa sacó sobre el caso “pareciera que es un niño que nació muerto, resucitó, fue robado y después fue traído al hospital y se le dio el alta”. En ese sentido, el médico dijo que estaba realmente “dolido” por estar en la boca de la gente como que acá “se manipulan datos o se roban chicos”. Asimismo, Lemos señaló que ningún bebé puede obtener un DNI sin la constancia de nacido vivo. “Y nadie firma un certificado de defunción en nuestro hospital sino le dan un DNI”, dijo.

Por su parte, Aracama explicó que la historia clínica tiene 17 hojas, firma un número igual de profesionales y es un documento legal. “Esto es un documento informático”, dijo en referencia a la carta perinatal. “Como jefa de ‘Neo’, queremos que la población sepa como funciona porque sino queda como que somos de riesgo y no puede ser. Mi cara tiene 37 años de salud pública y toda la población me conoce”, señaló.

No obstante, más allá de la indignación de los médicos, el secuestro de la bebé en el hospital ocurrió y hay una mujer detenida por el hecho. En la conferencia explicaron cómo funciona la seguridad: hay dos policías en las dos puertas de ingreso principales: en la guardia y en el ingreso de los vehículos. Además hay personal de seguridad interna. No obstante, admitieron que hay horarios donde se complican la situación. “Se puede filtrar alguien en alguna circunstancia especial para hacer este ilícito”, dijo Lemos.

Al respecto, el jefe de Neonatología dijo que en todo el país hay problemas de seguridad que atraviesan las instituciones de salud públicas. “En cualquier hospital hay inseguridad; hay hechos de violencia en todos los lugares y de hecho en nuestro hospital también. La seguridad es muy difícil de manejar: una persona que viene descontrolada por un problema con su hijo, su mujer o un accidente, muchas veces a uno le cuesta frenarlos o decirles ‘usted no puede pasar’”, dijo.

Durante un tramo de la conferencia, Aracama explicó largo rato como se confecciona el “carnet perinatal” que funciona en simultáneo con el sistema informático perinatal (SIP). Se trata de un software que sirve para procesar estadísticas para salud pública donde se colectan ítems de importancia referidos a mujeres embarazadas y los bebés recién nacidos. Por ejemplo, DINI, edad, domicilio, escolaridad, etc. “Es un instrumento que sirve para realizar estadísticas de salud”, dijo. En consecuencia, el SIP no es la historia clínica.

El carnet perinatal es el único de los tres formularios que es portado por la madre desde el primer mes de embarazo hasta que ingresa a la maternidad. Los obstetras escriben cada vez que la atienden durante el transcurso de los meses hasta el parto. La “historia clínica perinatal” es otro formulario donde se transcriben los datos del carnet cuando la madre llega al hospital para dar a luz. El tercer formulario está referido a la parte neonatal que solo se utiliza si el bebé es internado en Neonatología.

Lemos añadió que no hay institución privada de salud donde los recién nacidos sean dados de alta con el estudio de ojos, oídos, de enfermedades mentales y las vacunas como en el Masvernat.

 

 

 

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