El reclamo de citricultores llegó al Concejo Deliberante con un pedido de trato diferenciado al resto de los contribuyentes de la ciudad a la hora de pagar los tributos municipales. Las declaraciones de los citricultores ante los Concejales y ante medios de comunicación, comprometen a la gestión Municipal anterior al manifestar: “El ejecutivo miraba para otro lado, que por esas razones no pagaban impuestos”.
“Estas irregularidades de la gestión anterior de Carlos Cecco significan una pérdida millonaria de ingresos a las arcas municipales”.
Además desde el bloque oficialista del Concejo Deliberante, según pudo corroborar un medio de comunicación, se dijo: “En los ocho años de la gestión del ex intendente Carlos Cecco, se les otorgaba un certificado apócrifo, por el que se lo exceptuaba de dicho tributo, al falsear el dato de que estos empaques no estaban dentro del ejido municipal y de esta manera los citricultores evitaban abonar el 2% que estipula la ordenanza municipal de higiene y profilaxis”.
Según el Código Penal, estas acciones están contempladas como delito contra la Fe Pública, por falsificación de Documentos o alteración de un documento verdadero, que se concreta cuando un funcionario público, comete el delito haciendo abuso de sus funciones, pudiendo perjudicar con esa acción, en este caso no solo al Municipio, sino que a toda la comunidad de Federación.
