En tanto, de acuerdo con las versiones que comenzaron a circular en forma extraoficial, pudo saberse que uno de los autores materiales de la agresión habría sido su suegro, el popular dirigente radical “Pacha” Alalí, contra quien Ocampo había radicado en la noche del sábado una denuncia en la Comisaría Tercera por amenazas.
Esta versión fue corroborada por el conductor de radio y TV, Carlos Fulladoza. “Anoche (por el sábado), el Tata me llamó como a las once desde la Comisaría Tercera, donde había hecho una denuncia por una discusión y amenazas que había tenido –indicó Fulladoza-, y hoy (por ayer) me llamó uno de los chicos que trabaja con nosotros y me dijo que venga urgente, porque el Tata estaba golpeado, ensangrentado, que había venido el suegro y había ingresado a la casa con otra persona y lo habían golpeado”.
Además agregó: “Ahora esperamos que Alberto se ponga bien y que se haga Justicia, porque toda agresión está mal, pero esto de que irrumpan así, en una vivienda, evidentemente está muy mal”.
De acuerdo con la información que manejaba su colega y amigo, Ocampo había sufrido “un corte profundo en el cuero cabelludo”. Asimismo, Fulladoza ratificó la identidad de uno de los agresores, al afirmar que le había dicho que “habían entrado Alalí, el suegro de Alberto, y otra persona”, cuya filiación no pudo determinarse.
Por último, el conductor manifestó estar “cansado de este tipo de cosas, no hay razones para reaccionar de esta manera, porque los hombres deben reaccionar con el entendimiento que tenemos todos los seres humanos”.
En cuanto a las presuntas motivaciones del salvaje ataque, Fulladoza dijo no saber “con precisión, más allá de lo sucedido anoche, pero algo debe haber habido para que pase esto”.
Al cabo de las actuaciones policiales, frente a la Comisaría Tercera, ubicada en Moreno y Estrada, quedó estacionado un Fiat Palio, dominio CKJ200, con el parabrisas destrozado por un impacto que lo astilló en forma circular y sobre cuya puerta y ventanilla del lado del conductor podían observarse, aún frescos, rastros de sangre.
Según fuentes allegadas a la investigación, el suegro de Ocampo, el popular referente del radicalismo vernáculo “Pacha” Alalí, se habría presentado en esa dependencia denunciando haber sido víctima de una agresión con arma blanca, por la cual habría sido derivado desde la misma dependencia policial al Hospital Masvernat, donde también quedó internado su yerno.
