Un comunicado enviado por los asambleístas denuncia que seis inmensos camiones de prospección con destino a Uruguay ya están en Concordia. “Llegaron hoy 1º de agosto a escondidas del pueblo, provenientes del sur argentino”.
Aseguran que la prospección hidrocarbuífera “incidirá de manera irremediable en la salud y bienestar de la biodiversidad y en la preservación del equilibrio del ambiente en que vivimos”.
“Pedimos a todas las comunidades vecinas uruguayas y argentinas que acompañen esta manifestación en defensa de nuestro derecho no negociable de vivir en un mundo, nuestro único hogar, para la vida y no para la muerte. Estamos en rotonda de acceso a la ciudad de Concordia en ruta 015 desde las 5,45 de la mañana”, se señala en otro párrafo.
Más adelante, aseguraron que “no pueden confiar en funcionarios y gobernantes que firmaron un tratado internacional de preservación del Acuífero Guaraní, hoy en plena vigencia pero violentado por ellos mismos con la exploración y futura explotación de la cuenca Chaco-paranaense de gas de esquisto/lutitas. El presente y el futuro de esta biodiversidad no se hipoteca ni se vende paremos esta locura del fracking”.
Para determinar la estructura de las capas de roca subterráneas, los camiones llamado Vibroseis como los que se dirigen a Uruguay golpean el suelo con una gran plancha montada entre las ruedas. Los golpes producen vibraciones sísmicas de frecuencia determinada llamadas ondas de corte. Una red de medidores sísmicos denominados geófonos mide el tiempo de llegada de las ondas.