Un menor de edad tenía una herida leve en el cuero cabelludo, en la zona de la nuca. Recibió un impacto aparentemente de bala dado que dos individuos efectuaron disparos a distancia desde una moto, según indicó el hermano de la víctima a las autoridades judiciales. Fuentes consultadas indicaron que está acreditado que en la zona se realizaron disparos de arma de fuego pero no fue determinado fehacientemente si recibió el impacto de un balazo que fue amortiguado en una pared o un piedrazo por efecto del rebote de un disparo.
De todas maneras, luego de examinarlo el médico policial informó que presentaba una herida de arma de fuego en región occipital y quedó en observación. Esta mañana se le iba a dar el alta médica en el Masvernat.
Posteriormente esta madrugada, en la intersección de avenida Presidente Illía (ex Ruta Provincial 4) y Maestra López, personal del Grupo Especial de la Policía, procedió a identificar a un joven de 20 años quien, al palparlo, se le encuentra entre sus ropas un revólver calibre 22 largo, con el número de serie limado y un cartucho del mismo calibre. El fiscal de turno, José Arias, dispuso que sea aprehendido por la portación ilegal de arma de fuego y fue trasladado a la sección Alcaidía. El aprehendido expreso que el arma se la dieron unos amigos para que la escondiera. La Policía investiga si el arma secuestrada tiene relación con el hecho ocurrido anteriormente.
Además se informó que uno de los supuestos agresores dos horas antes del hecho había sido víctimas de la sustracción de un moto vehículo. A pesar de ser todos amigos y habiendo estado en horas de tarde juntos, por desavenencias propias entre ellos se habría originado el altercado.
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El hecho se suma a otros acaecidos la semana pasada. Hace una semana, en calle Diamante en el barrio San Pantaleón, una joven de 23 años, Cintia Puitrin, recibió un disparo en el rostro luego de negarse a que dos personas, menores de edad aparentemente, se llevasen la moto en la que circulaba con una amiga. La joven venía manejando cuando se cruzaron los menores en otra moto y le exigieron que les entregase el rodado. “No te voy a dar la moto”, le dijo la víctima del asalto y como toda respuesta recibió un tiro en la cara.
El proyectil, proveniente de un arma calibre 22, impacto contra el hueso duro del pómulo, cerca del ojo derecho, y se alojó en los cornetes del tabique nasal. Si la bala hubiese ingresado en el ojo, las consecuencias hubiesen sido mucho más graves. Si bien se mencionó en algún momento que la mujer iba a ser trasladada a Paraná para ser operada, finalmente fue intervenida quirúrgicamente en forma exitosa en el Sanatorio Garat. Aparentemente ya fue dada de alta. La Policía sigue buscando a los dos asaltantes implicados en el caso.
El tercer caso sucedió el viernes a la mañana. Un joven de 22 años, cuando se dirigía a su lugar de trabajo, en calle Saavedra entre Gualeguay y Villaguay, fue interceptado por un individuo que le recriminó por la muerte de su hermano, Rodolfo Barrios, sucedida a principios de mayo. En ese momento, le disparó cuatro veces y uno de los proyectiles ingresó en la región intercostal izquierda y no salió: la bala pasó a pocos centímetros del corazón. El herido fue atendido en el hospital Masvernat y luego dado de alta.
En relación al hecho, el Juzgado de Garantía de Concordia mediante oficio ordeno la captura y detención del agresor, de 39 años, quien fue identificado. Hasta el momento, no fue detenido pero en la Policía descuentan que habrá importantes novedades en las próximas horas.
