Los investigadores encontraron manchas hemáticas y una vaina servida en el portón de una de las viviendas. Los elementos fueron secuestrados por orden del fiscal de turno.
Los efectivos policiales, poco antes de llegar a la zona del conflicto, pudieron ver corriendo a un individuo con un arma de fuego en la mano de tipo “tumbera”. De inmediato, fue aprehendido por portación ilegal de arma de fuego. Según el parte policial, quería hacer justicia por manos propias-
Además los agentes observaron a varias personas golpeándose entre sí por lo que debieron proceder para restaurar el orden y calmar la situación. Asimismo, una mujer de 30 años fue aprehendida por resistencia a la autoridad por entorpecer la labor policial.
También se trasladó a una mujer de 24 años a quien se la identificó y se le realizaron pruebas de dermotest. Se trata de una pericia que consiste en levantar los residuos de los disparos de un arma de fuego mediante una cinta adhesiva que se pega y despega en las caras de ambas manos, los dedos y el antebrazo, y posteriormente se coloca en un soporte de vidrio, o de plástico.