El sangriento episodio ocurrió en una casa ubicada a cien metros del ingreso al Country Club, sobre el sector izquierdo, a la que el hombre (de apellido Schwindt) logró ingresar por la puerta trasera.
Una vez adentro, y en una situación que la Justicia trata de esclarecer, disparó con un revolver en la cabeza a su ex mujer (que se desempeñaba allí como empleada doméstica), tras lo cual se quitó la vida descerrajándose un tiro.
El Country quedó conmocionado por el crimen y suicidio, que sería pasional. De todas maneras el Juez de Instrucción, Eduardo García Jurado, solicitó la autopsia de los cuerpos a los fines de que el hecho quede debidamente esclarecido.
Según pudo saber, los vecinos no escucharon gritos o ruidos de forcejeos, como tampoco el estampido de los disparos, por lo que no se tiene certeza del horario en el que pudo haber ocurrido.
El sangriento cuadro fue descubierto a las 20 horas, cuando la inquilina de la vivienda notó una serie de anomalías en la parte trasera del terreno y dio aviso al agente de policía que cubre servicio en la entrada al barrio privado.
Acompañada por el efectivo, la mujer ingresó a la casa y se encontró con los cadáveres en el piso.
Intervino personal de Comisaría Sexta, Criminalística y médico policial, y estuvo presente en el lugar el Juez Eduardo García Jurado.
fuente: El Día
