En consecuencia, al ser optativo, el empleador es quien toma la decisión de adherir o no. “Los feriados provinciales los trabajan todos”, señaló Simonetti. Por lo tanto, al no tratarse de un feriado nacional, los empleados no tienen la opción de ausentarse o presentarse y cobrar doble el día. Tienen que trabajar como un día normal. “Todo lo que es feriado provincial o municipal no tiene carácter obligatorio”, explicó el sindicalista. En definitiva, el comercio minorista solo cierra los feriados nacionales y los domingos mientras que las grandes cadenas comerciales ni siquiera esos días dejan de abrir.
Más adelante, sostuvo que la ausencia de movimiento en bancos escuelas y reparticiones públicas hace prever un leve decaimiento de la actividad comercial. Pero no demasiado ya que el sólo hecho de que los comercios estén abiertos es un incentivo para quienes tienen el día libre de decidirse por hacer alguna compra atrasada o simplemente recorrer el centro.
San Miguel Arcángel es el patrono de la provincia y es por ello que, desde 1993 y a través del decreto 4359 del Ministerio de Gobierno, Justicia y Educación, el Día de San Miguel -que se celebra el jueves 29 de septiembre- fue decretado feriado provincial. La jornada suele estar acompañada de celebraciones religiosas en todos los distritos.