
GOYENECHE Y LOS FISCALES
Entre tales desordenes, por ejemplo: Cecilia Andrea Goyeneche, fiscal anticorrupción de Entre Rios, tenia una relación comercial con uno de los investigados en la megacausa de corrupción conocida como la de los CONTRATOS TRUCHOS DE LA LEGISLATURA, el Contador Público Nacional, Pedro OPROMOLLA, imputado en la causa “Contratos Truchos”. Más aún Opromolla, además de ser socio de la Fiscal Goyeneche, era socio del estudio contable del cónyuge de la Fiscal, Cr. Luis Sebastián ORLANDO BERTOZZI.
Todo esto fue, primero callado por Goyeneche y una vez que ello salió a la luz, la fiscal Goyeneche lo negó expresamente en una audiencia pública, bajo la estridente frase (muy usada en E. Rios) “ES FALSO SU SEÑORÍA”, refiriéndose claramente a su estrecho vínculo comercial con el imputado e investigado por ella misma, Pedro OPROMOLLA.
Por esa denuncia salió la corporación judicial a denostarme.
Solo Imaginarse: ¿cómo puedo ser funcional a la impunidad de Urribarri al denunciar a la fiscal ante el Jury, cuando fuimos con el Dr. Guillermo MULET, en absoluta soledad y sin ningún fuero ni privilegio, quienes denuncianos a Urribarri y a muchos de sus funcionarios ante la justicia penal.
Etica republicana es no reparar en denunciar a nadie, cualquiera sea su color político, lo que hicimos contra los funcionarios y contra los fiscales.
No especulamos ni andamos con miramientos ideológicos, decidimos hacerlo contra ambos.
Lamentablemente se nos atacó injustamente. Esta sentencia dictada en el día de la fecha, es un fallo ejemplar, único, que demuestra claramente que el hecho de haber denunciado a una de las fiscales de la causa, en absoluto incidió en la suerte del juicio a las personas imputadas y ello, además, porque de 4 fiscales quedaron tres (3), y con ello fue suficiente para dictar las condenas impuestas.
Esta data indica que, queda en EVIDENCIA, de modo irrefutable e incontrovertible, que en modo alguno la denuncia ante el Jury de la Fiscal Anticorrupción Cecilia Andrea GOYENECHE que hicimos en soledad absoluta con Guillermo MULET, incidió un ápice en la sentencia o en el resultado. Cada quien recibió lo suyo. Los funcionarios denunciados por corrupción, su condena en estas cinco (5) causas acumuladas y la fiscal “Anticorrupción Goyeneche (por sus graves desórdenes de conducta en otra causa – Contratos Truchos Legislatura) el pedido de formación de Jury ante los bochornosos actos que protagonizó en la mega causa conocida como la de los Contratos Truchos de La Legislatura entrerriana.
Nadie quedará impune.
Por eso, el resultado de la sentencia de ayer (histórica) pone al descubierto ante propios y extraños, que una denuncia (la dirigida a Goyeneche y García) no fue hecha con la subalterna intención de lograr IMPUNIDAD para URRIBARRI y algunos otros funcionarios de primera línea, como Pedro BAEZ y Juan Pablo AGUILERA, como repetían una y otra vez un minúsculo grupejo de jóvenes alguaciles que trabajan en fiscalia, sin concurso alguno, ni méritos académicos o antecedentes laborales.
La Fiscal “Anticorrupción” Goyeneche fue separada de su cargo luego de la denuncia y nada, absolutamente nada cambió.

GOYENECHE
La causa continuó hasta su finalización, hay sentencia condenatoria y la presencia o no de Goyeneche en ella, NINGÚN obstáculo procesal significó. Ella NO era ni ES IMPRESCINDIBLE ni el mundo deja de funcionar sin ella. Su lamentable actitud y enfermiza reacción ante la denuncia ante el Jurado de Enjuiciamiento, demostró el lado más sórdido de la iracunda Fiscal, que tampoco nada importante hicieron antes con su Jefe García, más que el seguimiento de algunas causas que tenían origen en denuncias ajenas.
Deberán reconocer propios y extraños que el hecho de haber denunciado a la Procuradora estrella, en nada alteró el resultado de estas cinco (5) causas en las que ejemplarmente fue, investigado, juzgado y sentenciado el dos veces Gobernador y actual Embajador en Israel y Chipre.
Ahora ella deberá afrontar y defenderse como corresponde ante el Jury. Y su Jefe, Jorge GARCÍA, deberá hacer lo propio ante la Comisión de Juicio Político en la legislatura. Eso sí, DEFENDERSE de verdad y con respeto, sin inventar mentiras ni blandir patrañas de bajísima estofa que hablan mucho peor de ellos, que de quienes ellos pretenden ensuciar. De paso y ojalá se den cuenta de ello: su política fiscal o criminal fracasó desde el día cero. García se creyó envuelto en una deidad de cuento de niños y ella, su adjunta, la mujer maravilla, impecable, impoluta, perfecta, invulnerable, infalible y única en su género y especie.
Nada fue, es y será así. Ambos, las “dos G” son apenas el emergente de una Argentina ganada por la mediocridad, la improvisación y el relato de paupérrima factura intelectual. García tiene una altura moral muy inferior a la física y Goyeneche, una calidad ética para la función, varias veces inferior a su costumbre de callar verdades inconvenientes y negar las verdades evidentes que nos abofetean la cara.