Apenas llegaron al lugar en el que el escape de gas era más que evidente por el fuerte olor, tanto bomberos como policía llamaron a Gas Nea para que se hiciera presente en el lugar. La empresa se negó y dijeron que ellos no prestaban servicio en ese lugar. Se descubrió entonces que el mencionado escape que alertó al vecindario, no era otra cosa que una garrafa a la que buscaban intensamente.