Si bien por ahora, Macri se mantiene en silencio, no salió a solidarizarse ni por Twitter (la plataforma predilecta de políticos, referentes y funcionarios) La Coalición Cívica/ARI, el partido de Carrió, emitió un comunicado en el que remarcó que las observaciones de la ex diputada“contribuyen a un JxC mejor, más sincero y plural”. “Juntos por el Cambio’ puede pedirle a Carrió que se retire definitivamente de la política, y tal vez es lo que quiere. Si eso sucede, lo hará, pero no puede pedirle que le mienta a la sociedad”.
También expresa que “no debe confundirse unidad con uniformidad” y que Carrió, en pos de esa unidad, “con dolor se agotó de decir en privado lo que hoy dice en público”.
El párrafo más sugerente del comunicado es el que asegura que “Mauricio Macri y otros líderes de Juntos por el Cambio han hecho las mismas observaciones que Elisa Carrió en otras oportunidades y no han provocado este escándalo y este pedido de silencio”.
Preocupado por la escalada del conflicto interno, el jefe porteño Horacio Rodriguez Larreta –cercano a Rogelio Frigerio– rechazó públicamente las críticas de Carrió manifestando que “Ese no es el camino. Es muy saludable que haya discusiones internas, pero el agravio es el límite”.
En tanto, Frigerio tuiteó sobre Carrió -quien dijo que su campaña en Entre Ríos había sido “escandalosa” y se metió en un supuesto asunto personal del legislador- que atentar contra la unidad de JxC es ser “funcional” al kirchnerismo. Cualquier denuncia se debe presentar en la Justicia con prueba y no en shows televisivos, que siguen alejando a la política de la sociedad”.
Carrió había dicho que Frigerio le “puso una amante en una lista” en las legislativas de 2017. “Yo dije: ‘Me bajo de la lista de Capital si no me sacan a la amante de Frigerio, que estaba incluso como su testaferro” en referencia a Joanna Picetti, exasesora en Aysa, a quien la justicia electoral le impidió asumir su banca por graves denuncias familiares.
