“Ayer a la tarde, como a las cuatro, me fui hasta la escuela a llevar una impresora que mandamos a arreglar. Cuando volví me encontré con esto: que habían entrado por el baño de mujeres que da a un baldío”, dijo Sánchez. “Pensamos que fue durante la noche anterior porque habían dejado cosas como para volver a llevarse”, señaló.
La rectora explicó que los vándalos doblaron una puerta de acero para ingresar a la preceptoría. “Esa puerta está ahí desde que la primaria funciona, desde hace mas de 60 años. Una puerta de acero. Como no pudieron romper la cerradura de acero, la doblaron desde abajo Impresionante la fuerza que tienen que haber hecho”, dijo.
Una vez en su interior, atravesaron una ventana para llegar hasta la rectoría. Ese era el objetivo: allí estaban cinco notebooks de administración y 10 netbooks que se reparten a los alumnos. “Eran las nets que estaban reparadas para que los chicos las vayan a retirar”, indicó. La PC que funciona como servidor de la escuela no alcanzaron a llevársela pero ya la habían colocado en el suelo lista para ser cargada. “Estamos viendo si funciona o no”, dijo.
Además sustrajeron una centralita de un teléfono fijo. “Es nuestra única vía de comunicación que compartimos a medias con la primaria porque no tenemos como para pagar un teléfono extra: es como una repetidora del teléfono de primaria”, indicó. Y una consola de sonido.
“Más allá del valor monetario, para nosotros son muy valiosas. Dentro de las computadoras que se llevaron, se llevaron el sistema de títulos que para nosotros es absolutamente valioso porque tenemos que hacer todo un proceso para volver a emitir títulos”, explicó. “Son cosas que nos hacen absoluta falta para funcionar”, recalcó.
La rectora destacó que la policía concurrió de inmediato luego de que ella realizara la llamada. “Fueron los muchachos de Investigaciones, levantaron huellas. De hecho, ahora estoy en la Policía porque me dieron un dato y me vine para hablar con ellos”, dijo.
La secundaria funciona en un subsuelo donde antiguamente funcionaba el laboratorio de ciencias de la primaria. Al edificio escolar acuden en épocas de clases casi 1.000 alumnos divididos en tres turnos. Las modalidades educativas van desde jardín de infantes hasta secundaria de adultos. Sánchez explicó que a la primaria no entraron porque tiene una alarma. “La directora paga de su bolsillo y por eso tienen alarma”, explicó.
Sánchez explicó que a la escuela todo le cuesta mucho. Muchos piensan que es una escuela céntrica pero en realidad es más bien de la zona sur. “Parece céntrica pero no es el centro. Compartimos el edificio que nos presta la primaria porque no tenemos edifico propio. No tenemos aportes de nada. Estamos en un subsuelo sin ventanas casi: es una situación de hacinamiento y esto que ahora nos destruye toda la parte administrativa”, dijo.
De la misma forma, la mujer señaló que ahora están analizando la posibilidad de pedir donaciones para que les instalen una alarma. Sánchez fue rectora de la escuela Felipe Gardel y allí sucedió lo mismo. Pero luego recibieron una donación de parte de la CTM (Comisión Técnica Mixta de Salto Grande) y pudieron contar con un dispositivo de alerta ante intrusiones. Pero el gasto de mantenimiento corre por cuenta de ese establecimiento educativo. La rectora dijo que en caso de recibir una alarma en la escuela ubicada en Perú y Bernardo de Irigoyen, probablemente iba a tener que pagarlo de su bolsillo. “Las escuelas no recibimos ningún tipo de subsidio ni tenemos como justificar ese gasto tampoco. Solamente la cooperadora que nos dé una mano”, dijo.
Por último, la rectora dijo que lo que más les dolía era que habían cometido un robo en un establecimiento donde se habían jugado por la educación de los estudiantes del barrio. “Si investigas un poquito vas a ver que fuimos una de las pocas escuelas que fuimos hasta los hogares de los chicos que no tienen Internet. Fui yo personalmente acompañada por un grupo de docente, por el director de Educación municipal, que es docente de la escuela. Nos pusimos el barbijo, pusimos nuestros vehículos y visitamos a todos los chicos que no tienen Internet que son un montón. Les llevamos el material que se les sube a los chicos que tienen Internet; se los imprimimos en la escuela con las nets que se robaron y se lo llevamos gratuitamente a los hogares”, dijo.
