La concejal Gladis Tribulatti señaló que a la Concertación Entrerriana le ha sucedido lo mismo que a las restantes minorías: quedarse sin representación dado la “apabullante cantidad de votos que ha reunido el Justicialismo en sus dos presentaciones”. Consideró que la ciudadanía, ante la posibilidad de que el intendente Juan C. Cresto continúe cuatro años más en el cargo, se “volcó masivamente” a otro proyecto que tiene “un cúmulo importante de votos”.
Asimismo, pasados cuatro días de las elecciones, no encuentra razones para evaluar una autocrítica sobre la actuación del partido. “A todos nos ha pasado lo mismo en cuanto a las elecciones anteriores y las de ahora; le ha pasado al radicalismo que es un partido centenario como nos ha pasado a nosotros que tenemos cuatro años de vida”, acotó. El sábado próximo, la Concertación Entrerriana se reúne en Villaguay para “hacer algunos comentarios”. “No vamos a flagelarnos, ni vamos a cambiar nuestra línea de conducta”, adelantó Tribulatti.
Tribulatti no cree que el distanciamiento con Ricardo Zubillaga, a raíz de que votó a favor de la compra de maquinarias entre otras cuestiones solicitadas por el Ejecutivo, haya influido en la escasa cosecha de votantes. “Tuve una línea de conducta y una coherencia que la gente rescata. Creo que la gente sabe que la representación del Nuevo Espacio la tuve yo dentro del Concejo y la sigo teniendo”, agregó.
“A poco tiempo de estar en el Concejo, el amigo Zubillaga decidió volver a sus filas de siempre. Muchos peronistas se habían sumado al Nuevo Espacio pensando seguir haciendo exactamente las mismas cosas y cuando se dieron cuenta que las conductas iban a ser otras, decidieron volverse a su lugar”, explicó. La titular del CTA englobó en esa situación a Luis Edgardo Jakimchuk (candidato a diputado por el solanismo) y a Juan Domingo Zacarías (diputado electo por el bustismo). “Creen que en este espacio se consiguen mejorías para las personas y no que la política es un servicio para conseguir la mejoría para toda la sociedad”, indicó.
Justamente, del intendente electo, Gustavo Bordet, aseguró que “muchos recuerdan la gestión muy correcta de su papá (Elvio Bordet) aunque en lo que hace al progreso de la ciudad no significó mucho pero tenemos que decir que tenía absolutamente saneadas todas las cuentas, fue la única gestión del Justicialismo en que se pudo ponderar ese tipo de cosas”.
Respecto de la futura composición del cuerpo, cuyos integrantes serán todos justicialistas, indicó que “la ciudadanía de Concordia tendrá que hacerse cargo porque le va a costar enterarse mucho de las cosas que no se tiene que enterar, dado que no va a haber oposición”.
Tribulatti expresó que “los compañeros del justicialismo lamentablemente confunden la palabra lealtad con complicidad. Cubrir a un compañero que no hace bien las cosas no significa ser leal, significa ser cómplice”. La edil apuntó a los concejales Mireya López Bernis (PJ) y Roberto Abel González (PJ). “Durante tres años le levantaron la mano a todo lo que Cresto quiso. Ahora los está llevando Bordet, ¿pueden evaluar si va a haber algún tipo de diferencia después entre los doce concejales?”, expresó.
Si bien admitió la mejoría de la ciudad en sus parámetros económicos puede haber influido en los resultados, expresó que no pueden compararse con los de 1974. “Es un disparate. En el año 74 vos salías de un trabajo por tu propia voluntad y a los 10 minutos tenías otro. Ahora quiero saber quien puede hacer eso hoy en día. ¿Que hace nuestra juventud que va se prepara, se capacita y después deambula por todos lados mendigando un lugar donde ir a trabajar?”, sostuvo.