La principal novedad de la interna del PJ la dio ayer el ministro de Gobierno, Sergio Urribarri. En su carácter de dirigente de la agrupación Evita ratificó que el gobernador Jorge Busti dará a conocer este 25 de mayo, cuando se cumplan dos años del gobierno de Néstor Kirchner, los nombres de los candidatos que “se consensuaron con el Presidente de la Nación.”
La decisión causó sorpresa en algunas franjas del bustismo, en las que se esperaba que la revelación de los bendecidos por el oficialismo se postergara todo lo posible para llevar a su mínima expresión el efecto de la interna sobre la acción de gobierno. “Busti cree que con esto va a cortar la interna, pero puede ser al revés”, advirtió, preocupado, un dirigente del sector que prefirió no opinar públicamente hasta no tener un contacto directo con el Gobernador.
Lo cierto es que desde ayer, por primera vez en este proceso, se pueden afirmar dos cosas: 1) que efectivamente habrá confrontación en la interna del 7 de agosto y 2) que ya están confirmados casi todos los candidatos de las tres listas.
Por lo que trascendió ayer, la lista que avala el Gobierno estaría encabezada por la diputada de Paraná, Blanca Osuna, miembro del bustismo ortodoxo. Esto evitaría que un previsible triunfo electoral sea capitalizado por otro sector interno, de cara a 2007. Por eso es que el diputado provincial Raúl Solanas se correría al segundo lugar. En el tercero, el golpe de efecto: el ex intendente de Concepción del Uruguay, José Lauritto, fundador del Nuevo Espacio cuando ese nombre todavía designaba a una corriente interna del PJ, fue convencido por Busti. Su buena imagen está asociada al perfil político que cultiva Emilio Martínez Garbino; ese es su principal mérito para la disputa de votos entre peronistas e independientes. Además, como Solanas (y a diferencia de Busti) Lauritto apostó por Kirchner en 2003 pero con mejor suerte electoral que en Paraná.
En el entorno del Gobernador se explica que los contactos con Lauritto llevan mes y medio y que ya existía una decisión de sumarse al sector que lidera Busti, pero con vistas a 2007.
El ex intendente de Concordia, Hernán Orduna, es el único que hasta ahora ha reservado lista en la Junta Electoral, la 202. Pero lo que importa no es el número sino el nombre: Frente para la Victoria, el mismo que llevó Kirchner para las presidenciales de abril de 2003. Esa es la idea, mostrarse como la lista más kirchnerista, la que ofrece candidatos que pueden sumar capital político para hacer viable el proyecto transformador que, dicen, encarna Kirchner. Algo así como kirchneristas puros, que responderán antes a los intereses de Kirchner que a los de Busti. Una opción para el electorado no bustista; una oferta que compite —aquí también— con el Nuevo Espacio.
Con mucho más peso testimonial que de estructuras, la lista K se integrará con el ex fiscal del Estado de Busti, y ex precandidato a vicegobernador por el Frente Grande, Raúl Barrandeguy, que fue el apoderado general de la lista de Kirchner en abril de 2003. En sus últimas apariciones políticas se lo vio junto al solanismo.