El oficialismo y la oposición no pudieron ponerse de acuerdo respecto del proyecto de reforma de Ganancias que se debate en Diputados. Por eso, este jueves en la comisión de Presupuesto y Hacienda se firmarían al menos cinco dictámenes para ser llevados al recinto.
Sin embargo, el oficialismo de la Cámara baja aceptaría algunos cambios a su proyecto original, como deducir viáticos y los alquileres de viviendas hasta un 40 por ciento del valor y con un tope de 4 mil pesos mensuales, pero mantiene las deducciones por conyugue, aunque por un valor más bajo, similar a los descuentos que pueden hacerse por hijos a cargo.
Además se duplicará el tope de facturación a partir del cual un trabajador monotributista (quienes están exentos del pago de Ganancias) se ven obligados a pasarse al régimen de autónomos.
Los cambios los armaron en una reunión los diputados del interbloque Cambiemos Luis Pastori (UCR) y Luciano Laspina (PRO) en Casa de Gobierno, sin la intervención de dirigentes opositores, que de todos modos insistirán con dictámenes propios.
"No hay negociación. Seguramente cada uno va a ir con un dictamen propio. La negociación se abrirá con los dictámenes escritos", señalaron fuentes del Frente Renovador.
Por su parte, el Frente para la Victoria anticipó que llevará su propio dictamen, en el que planteará que el tributo sea rebautizado, pasando a llamarse "impuesto a los Altos Ingresos", y que sean alcanzados el 10 por ciento de los asalariados.
Y el Frente de Izquierda también impulsará un dictamen distinto, mientras que el bloque Justicialista (BJ) anunció que hará lo propio, aunque desde el Frente Renovador no descartaban acordar con este sector, en conjunto con Libres del Sur y el Partido Socialista.
