Al parecer, los industriales buscan hablar sobre la necesidad de una rápida reactivación económica, la recuperación de la confianza en el Instituto Nacional de Estadísticas y Precios (Indec), la reducción de la presión impositiva, la eliminación de los controles de precios y el tipo de cambio.
Es justo este último punto el que puede dividir las aguas en el sector, ya que mientras que algunos aseguran que no es necesario modificarlo, otros afirman que el dólar está atrasado por el alza de los costos internos. En lo que sí están de acuerdo es en la necesidad de reclamar por los retrasos en los reintegros, en la necesidad de desgravar IVA y Ganancias con el objetivo de estimular las inversiones, y en discutir una nueva ley de ART.
El vicepresidente de la entidad, José Ignacio De Mendiguren, aclaró que desde su sector «no vamos por la devaluación. Debemos discutir qué cotización del dólar necesita la Argentina». A su vez, se mostró preocupado por la salida de divisas, las que calcula en u$s 6.000 M en el segundo trimestre.
Carlos de la Vega, de la Cámara de Comercio, coincide con el planteo de industrial sobre el Indec y dijo que «se pulverizó el sistema estadístico y eso también importa porque daña el clima de negocios».
Por su parte, el campo – al igual que la UIA – intentará conversar sobre la reactivación económica y el Indec, pero sumará temas propios: la baja de las retenciones y en las trabas a las exportaciones.
Tal es así que Hugo Luis Biolcati, presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), apuntó que «si esto se va a limitar a disminuir las retenciones al maíz y al trigo, no nos sirve para nada», dando a entender que quiere tratar también una reducción a los gravámenes a la soja.
Además, el sector agropecuario buscará conversar sobre una segmentación entre productores, mejorar los valores de la carne y de la leche y tratar la intervención de la ONCCA en las exportaciones, publicó el diario Clarín.