Desde junio del año pasado, les estaban adeudando el medio aguinaldo. “Lamentablemente se había equivocado el contador y siempre pasa en estos casos, y no digo que lo hacen a propósito, pero siempre a favor de la empresa”, acotó. La suma que la empresa adeuda, entre $ 250 y 300 a cada empleado, no es un “monto grande”, dijo Camejo.
Monte Pilone es una firma tercerizada que presta servicios para Ayuí y tiene domicilio en la provincia de Tucumán. Los empleados decidieron movilizarse hasta el empaque de Ayuí ubicado enfrente a Villa Zorraquín dado que es “solidariamente responsable” de la labor que realizan.
El gremialista señaló que desde hace tiempo que vienen teniendo distintos problemas con la empresa. Junto con el ministerio de Trabajo han acudido a conciliaciones obligatorias pero sin resultado alguno. “Por ahí llega una instancia que el compañero se cansa. No nos gusta medir fuerzas ni que nos tilden a los trabajadores de piqueteros pero el sindicato acompaña a los trabajadores cuando están en su justo reclamo”, señaló Camejo.
La modalidad de contratar tercerizadas es una costumbre que se instaló desde hace muchos años en la ciudad. Es una forma de pagar “mano de obra barata” de parte de las empresas grandes. “Los empresarios son más ‘negreros’ que las tercerizadas. Por ahí se ofenden algunos pero los compañeros se cansan de reclamar y que no tengan respuestas”, dijo el gremialista.
Para Camejo, la cantidad de tercerizadas es “incalculable” debido a que día a día están surgiendo empresas nuevas. Son capataces que conocen trabajadores, arman cuadrillas para trabajar y deciden convertirse en “pseudo-empresarios”, según la descripción de Camejo. El problema surge con los despidos o los accidentes debido a que son insolventes. Por ello, en el segundo de los casos, la obra social del Sindicato debe acudir en su ayuda.
