"Fue un momento muy emotivo porque en la Argentina viven muchos familiares de sobrevivientes del Holocausto", señaló el canciller tras participar de la ceremonia y agregó: "Hubo muchos sobrevivientes que se fueron a Argentina e incluso conocí a muchos familiares de ellos cuando fui creciendo. Por la dualidad de la situación, pensé mucho en Sara Rus, sobreviviente del Holocausto y quien luego vivió la desaparición de su hijo por parte de la última dictadura".
Timerman fue uno de los primeros en ofrendar la corona en nombre de la Argentina, dado que fue uno de los pocos representantes de otros países con rango ministerial que participaron del acto.
La conmemoración, en la Plaza Gueto Warsaw en el museo Yad Vashem, en el Monte del Recuerdo, se inició anoche con las palabras del presidente de Israel, Shimon Peres, y del primer ministro de ese país, Benjamin Netanyahu. Luego, seis sobrevivientes del Holocausto encendieron las velas en recordación a los seis millones de judíos asesinados.
Esta mañana, la ceremonia continuó cuando comenzó a sonar una sirena durante dos minutos en memoria de las víctimas, que se escucharon a lo largo de todo el país y detuvo todo tipo de labor. Las personas que caminaban por la calle frenaban su marcha y los vehículos se estacionaban al costado de los caminos, mientras que sus ocupantes descendían para permanecer de pie y en silencio.
La actividad del canciller continuará esta tarde con la visita a Peres en su residencia y por la noche con una cena que compartirá con su par local, Avigdor Lieberman, en el palacio de Relaciones Exteriores, previa firma de acuerdos bilaterales en materia cinematogáfica y educativa.
La agenda de la visita del canciller a Israel continuará el martes con una reunión con organizaciones no gubernamentales relacionadas con la paz mundial y con el encuentro que mantendrá con la ministra de Justicia, Tzipi Livni.