
Han inaugurado un nuevo detalle, en el mascarón de proa ya no ponen a los descendientes de las familias que se apropiaron por asalto de las tierras arrebatadas a los pueblos originarios al sur del río salado, en la miserable jornada a la que llamaron pomposamente “la conquista del desierto”. Porque en eso son verdaderos especialistas: en poner nombres rimbombantes a todo. De hecho, les gusta autodenominarse ‘familias patricias’ en un intento grotesco de ofrecerse como una especie de nobleza rioplatense a falta de una nobleza ancestral como la europea, cuando en realidad, todos sin excepción descienden de aventureros expulsados por razones varias, todas indignas, de Europa; que tuvieron, contra su voluntad, que emigrar a los infectos pantanos del Río de la Plata, a vivir en el aislado ostracismo, y la miserable realidad cotidiana de estos territorios, en aquellos tiempos demasiado lejanos de todo.
Comerciantes, contrabandistas, aventureros de toda laya, se transformaron con el correr de algunas pocas generaciones en la oligarquía, improperio, que por misteriosas razones psico/sociológicas, a ellos, a falta del apelativo ‘nobleza’, no les disgusta portar.
Ahora se permiten una suprema ironía: poner al frente de su organización más emblemática nada menos que a un matarife, dando cuenta del sentido de humor bizarro que cultivan, porque siempre les ha gustado reírse de nuestra realidad social, porque de algún modo les permite sentirse por encima del ‘aluvión zoológico’ como les gusta designar privadamente a los movimientos sociales que vienen rebelándose contra este modelo de miseria, inequidad y exclusión social, que han sabido, de una u otra manera preservar hasta el presente.
Ya no se ponen en la tribuna a palmear advenedizos, como cuando el ex presidente de la SRA, Luciano Miguens, se permitió reírse cancheramente en público de Alfredo De Angeli, en la exposición rural de 2008, sino que directamente los ponen al frente de la gremial para hacerlos decir y hacer lo que quieran, sin necesidad de exponerse personalmente.
La nueva comisión directiva de la Sociedad Rural Argentina es un seleccionado oprobioso de todos los males que nos afectan, desde Marcos Pereda, a quien ya hemos atendido en notas anteriores (VER NOTA), [i]pasando por el entrerriano Juan Diego Etchevehere, hermano de Luis Miguel Etchevehere, ambos condenados como delincuentes[ii] por la justicia entrerriana.
Tampoco se privan del apoyo de un maltratador femenino, uno de los mayores financistas del macrismo, David Lacroze, que tuvo su momento de fama por insultar a Cristina Fernández de Kirchner en vuelo en el que ambos coincidieron como pasajeros.
La mesa está servida, ‘cartón lleno’, como diría mi tía Serafina a la que le gustaba jugar a la lotería. En los próximos meses deberemos acostumbrarnos al juego sucio y artero de estos personajes, que han venido a disputarle el puesto de miserable a la reina del exabrupto, la ‘versátil’ Patricia Bullrich: pero como dice un amigo panzón de tantas eses que se ha comido: asinomae.
[i] https://www.diariojunio.com.ar/noticia.php?noticia=89028
[ii] RAE: persona que comete un delito https://www.telam.com.ar/notas/202105/554119-la-camara-federal-de-apelaciones-de-parana-ratifico-la-condena-a-los-etchevehere-por-estafa.html