El titular del Juzgado de Instrucción de Chajarí manifestó que el problema debería ser atacado en varias áreas. Apuntó que “la gente compra las cosas que se roban” y explicó que “indudablemente se siguen robando muchos elementos porque hay gente que compra esos elementos”, al punto que informó que son numerosos los “procesamientos por encubrimiento, ya que cuando alguien compra por 20 pesos lo que en realidad vale 200, sabe que ese elemento seguramente proviene de un ilícito”.
Al respecto de las leyes en vigencia Redruello apuntó que “existe una legislación que establece que los delitos cuya condena no lleva más de seis años, son excarcelables» y agregó que “al quedar en libertad, la conducta de esa persona puede ser reiterativa”.
“No hay soluciones mágicas”, advirtió el magistrado y recordó lo que sucede a nivel nacional, “donde las autoridades están abocadas a hallarla”
“El problema tiene otros orígenes y ahí habrá que buscar la solución. En lo que hace al mejoramiento de la legislación, si bien la situación obliga a tomar medidas urgentes, no es a todas luces la solución de este problema”, dijo.
Consideró que “el problema es que tenemos una legislación permisiva que ha llevado, desde hace 50 años atrás, a que quienes han estado a cargo del Estado, en connivencia con particulares, hayan vaciado el país y llevado a la destrucción todo el aparato productivo, lo que produjo esta enorme desocupación, exclusión y marginalidad social. Aquí hay que buscar las causas”.
Dijo además que “la solución no llegará si no se modifican las leyes para lograr que las mismas permitan que los funcionarios públicos de los tres poderes que vaciaron el Estado, por acción o por omisión, junto a los particulares que se asociaron para ello, tengan penas importantes privativas de su libertad y se los obligue a devolver lo que le han llevado al Estado”, enfatizó.
En lo que hace al funcionamiento del Juzgado a su cargo, Redruello apuntó que falta gente y elementos. Dijo también que se trabaja entre 10 y 12 horas diarias y no seis como se dice en algunos medios. “Me pareció pintoresco el pedido del señor Blumberg sobre que los juzgados tendrían que trabajar ocho horas diarias”, apuntó al tiempo que aseguró: “Si se trabajara ocho horas por día estaríamos tapados de trabajo”.
“Incluso, a veces, carecemos del auxilio inmediato de la policía, porque no tienen los medios necesarios para hacerlo”, apuntó.