Las diversas medidas adoptadas por el Gobierno Nacional ante la escasez de dólares, generó inconvenientes a las empresas que no logran importar insumos, herramientas y maquinarias esenciales para la producción. Frente a esta situación, se multiplicaron las problemáticas para llevar a cabo el normal desenvolvimiento de la actividad industrial, que está afectando a toda la cadena. «No sabemos si llegamos a diciembre, estamos analizando vacaciones anticipadas para el personal porque nos estamos quedando sin insumos o tenemos máquinas paradas porque no nos dejan traer un repuesto», explicaron desde el sector.
En tanto, Florencia Vitale, Vicepresidente de CARMAHE, dijo: «Tenemos que estar pidiendo permiso todos los días para poder trabajar, es traumático, vivimos mirando el celular para ver si me aceptaron o no la SIRA, para ver si hoy puedo o no seguir con mi negocio».
Entre las últimas restricciones, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) redujo, a través de la Resolución General 5260/2022, de 3 mil a mil dólares el monto máximo para ingresar mercadería al país mediante el sistema «Puerta a Puerta», lo que les impide resolver a la brevedad la necesidad de un insumo esencial, herramienta o repuesto con urgencia. «Aunque el costo de Courier es el doble, para nosotros hoy la principal urgencia es el tiempo, hay empresas frenadas desde hace 15 días por no poder traer un repuesto que no se produce en el país, y si no podemos producir, tampoco exportar, así que no sólo están frenando las importaciones sino también las exportaciones», explicó otro de los directivos de CARMAHE, y añadió: «Las pymes tenemos la trazabilidad de cada máquina para explicar qué repuesto necesitamos y para qué cliente».
“A lo largo de los años hemos sabido ganar crédito de nuestros proveedores internacionales y confianza en nuestro cumplimiento, y en este contexto de dificultades tenemos miedo de perder ese crédito. Alguien en el Gobierno nos tiene que recibir, escuchar y brindar una solución, porque esta problemática frena las exportaciones en el país”, expuso el Ing. Alfredo Bonazzi, presidente de CARMAHE y agregó: «Los barcos nos evitan como destino. Antes de la pandemia, llegaban de Europa en 30 días, ahora vienen cada 45 y 60, por falta de flujo de mercadería y las trabas a las importaciones, a ese tiempo hay que sumarle todas las demoras por la habilitación para importar».
Entre los insólitos inconvenientes que deben sortear las PyMES, con demoras de hasta 4 meses en la entrega de un repuesto, es que mientras les corre la garantía de la compra y, por ejemplo, cuando una empresa recibió las plaquetas, no funcionaban y la garantía ya había caducado. A otra no le dejan importar cartuchos para sus impresoras 3D, para la fabricación de prótesis de fabricación nacional, pero sí el sistema habilita importar las prótesis directas.
“En mi caso importo unos punzones para punzonadoras con control numérico que se utilizan mucho en la fabricación de maquinaria agrícola que se exporta, pero hace casi dos meses que no los estoy logrando entregar y las máquinas, que se exportan a 50 o 60 mil dólares, no se pueden enviar porque falta una pieza que sale 500 dólares”, expuso un empresario.
En ese sentido, el presidente de CARMAHE concluyó: “Argentina necesita aumentar las exportaciones para que ingresen dólares, pero si nos frenan poder importar un insumo o repuesto para una máquina, no podemos seguir produciendo”.
Es por eso que desde CARMAHE esperan ser recibidos por el secretario de comercio Matías Tombolini, para poder trabajar en conjunto en búsqueda de estabilidad para el sector.
Desde CARMAHE piden que el gobierno los reciba para acercar las propuestas del sector:
- Ventanilla Especial para atender las urgencias de repuestos, herramientas e insumos esenciales
- Courier diferencial de hasta 5 mil dólares y hasta 50 kg para repuestos, herramientas e insumos esenciales
- Agilizar las SIRA, con plazos determinados que les permita tener previsibilidad