A continuación, el texto titulado «Repudiamos enérgicamente las irresponsables declaraciones de Eduardo Duhalde» y firmado por Abuelas de Plaza de Mayo, Madres de Plaza de Mayo – Línea Fundadora, Familiares de desaparecidos y detenidos por razones políticas, H.I.J.O.S. Capital, Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), Asamblea Permanente por los Derechos Humanos, Liga Argentina por los Derechos Humanos, Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos (MEDH), Asociación Buena Memoria, Fundación Memoria Histórica y Social Argentina, Asamblea Permanente por los Derechos Humanos La Matanza, Familiares y Compañeros de los 12 Santa Cruz y Comisión Memoria, Verdad y Justicia Zona Norte.
«Repudiamos enérgicamente las irresponsables declaraciones de Eduardo Duhalde»
«Llevamos más de 37 años de una democracia que, con avances y retrocesos, se ha ido afianzando. Una y otra vez, el pueblo argentino ha dicho nunca más y lo seguirá haciendo en cada oportunidad que los destituyentes de siempre intenten socavar el orden constitucional.
En la situación en la que nos encontramos, en medio de una pandemia que se está llevando la vida de cientos de miles de personas, las palabras del ex mandatario son de una irresponsabilidad mayúscula y están en línea con una campaña concertada que busca debilitarnos como sociedad.
Ahora mismo, miles de trabajadoras y trabajadores arriesgan su propia salud y la de sus familias para atender –en todos los niveles– la emergencia sanitaria que nos ocupa, y somos millones las argentinas y argentinos que nos responsabilizamos y cumplimos con las normas de cuidado indispensables para evitar el colapso del sistema.
Y es en este contexto que Duhalde sale a presagiar muertes, violencia política y golpes de Estado. ¿Por qué? Debería hacerse cargo y dar explicaciones. El último golpe fue el de 1976. Ahí conocimos, de primera mano, lo que es un genocidio. 30 mil desaparecidos. Secuestros, torturas, violaciones, vuelos de la muerte, apropiación de centenares de bebés. Centros clandestinos en todo el territorio nacional.
El pueblo argentino ha decidido –y lo volverá a reafirmar cada vez que sea necesario– que esa fue y seguirá siendo la última dictadura. Tenemos que estar alerta y señalar las acciones desestabilizadoras, pero sobre todo mantener la unidad y apostar al bien común sabiendo que somos la vasta mayoría. No permitamos que los discursos que pretenden sembrar el miedo y el caos le ganen al amor y a la ternura. Ni hoy ni nunca más»