«Una persona de palabra, muy solidaria. Sus compañeros de Rotary la eligieron mejor compañera. Sostenía que era o blanco o negro, no existían los grises para ella. Qué orgullo haber tenido está hija», relató emocionada Cristina Salas, su mamá, que se hizo presente en el reconocimiento.
La historia del corazón en la Costanera comienza con la iniciativa de Orfilia Vilchez, mamá de uno de los mejores amigos de Luciana.
Orfilia recuerda a Lu permanentemente y busca diferentes acciones para homenajearla, ya ha corrido maratones con una remera con una foto de recuerdo entre otras cosas.
«Navegando por internet vi el corazón en una calle de México, entonces entré a la página de reciclado y vi los beneficios que tiene para el Hospital Garrahan y para la casa de ese lugar que alberga a los chicos cuando están en tratamiento. Como siempre Luciana está presente en mi corazón lo propuse en la Costanera y gracias a Dios llegué a la puerta de Aldo Alvarez que me dió su corazón y enseguida se puso a trabajar en esto», precisó.
El CORAZÓN se encuentra ubicado en la parte alta de la Costanera, a metros del Museo Interactivo Costa Ciencia, va a estar abierto al público recibiendo tapitas de gaseosas para trasladarlas al Hospital Garrahan.
«Es un homenaje a una amiga que desgraciadamente falleció y sus amigas trabajamos activamente para asociaciones que tienen que ver con el Cáncer. Trabajo hace 14 años para la fundación Garrahan, hoy me emocioné cuando ví el corazón. El corazón los está esperando a todos», concluyó Amanda Borgaray, Coordinadora de la Fundación Garrahan Concordia.