“Me armaron un problema donde no lo había”, refunfuñó ayer a la mañana Néstor Kirchner, en su despacho, en una reunión a la que asistieron varios funcionarios, a guisa del ingreso de la médica cubana Hilda Molina y su madre en la embajada argentina en La Habana. El episodio generó un espasmo de tensión en la relación bilateral, en momentos en que el presidente argentino y su par cubano, Fidel Castro, intercambiaban más que cordiales cartas para tratar de destrabar la situación de la neurocirujana. El malestar presidencial devino en hechos y por la noche el jefe de gabinete de la Cancillería, Eduardo Valdés, y el embajador argentino en La Habana, Raúl Taleb, estaban “renunciados”, según confiaron a este diario desde la Casa Rosada. Mientras esto ocurría, la médica y su madre abandonaron la delegación argentina en la capital cubana.
El gobierno de Kirchner inició gestiones para que el gobierno cubano deje salir a la médica a visitarlos. La administración del patagónico acotó este affaire con el status de “humanitario”, abriendo así un paraguas político para no enturbiar las relaciones con La Habana, que Kirchner quiere preservar.
La semana pasada, Kirchner envió una conceptuosa nota a Castro, llamándolo “amigo” y pidiendo el permiso de viaje para Hilda Molina. Fidel respondió anteayer diciendo que invitaba a la familia de la médica a visitarla en La Habana, y ofreció incluso pagar los pasajes. Los Quiñones adujeron que esa propuesta, que la Casa Rosada había caracterizado como “un paso adelante” en la resolución del problema, violentaba sus convicciones ideológicas, por lo que les parecía inaceptable. Paradójicamente, el embajador argentino en La Habana (convocado a Buenos Aires), Raúl Taleb, coincidió con los dichos de Quiñones, con lo que contradijo la posición oficial de su propio gobierno.
La tensa situación no llegó a ser una crisis, según el diario Página 12. A pesar de eso se cobró dos víctimas. Anoche, Valdés llegó desde Brasil a Buenos Aires con su renuncia redactada. Taleb no abordará el avión de regreso a La Habana que preveía tomar hoy mismo.