La empresa sueco-finlandesa Stora Enso hizo ayer la primera plantación de árboles en Durazno, 177 kilómetros al norte de Montevideo, donde levantará una planta de pasta de celulosa, que será la tercera de Uruguay, en muy corto plazo.
El acto se desarrolló en «La Paloma», en el departamento (provincia) de Durazno, con la presencia de ejecutivos de Stora Enso, la mayor productora de pasta de celulosa del mundo, que tiene fábricas en 40 países.
El intendente de Durazno, Carmelo Vidalín, dijo que «se trata de la primera plantación de las 5.000 hectáreas previstas para este año por parte de la empresa, que ya adquirió 40.000 hectáreas de campos, pero que prevé alcanzar en breve plazo las 120.000”.
Vidalín informó de que es posible que la empresa estudie adelantar la construcción de la planta de celulosa para 2009, si los estudios medioambientales de los inversores coinciden con los técnicos del gobierno uruguayo.
El intendente dijo que el presidente de Stora Enso para América Latina, Nils Graftron, le aseguró que «los controles de impacto ambiental serán más rigurosos que los de Europa».
Añadió que ello ocurrirá también «por un tema de comercialización, porque para ser colocados en el primer mundo, los productos requieren de un certificado de cuidado y prevención del medio ambiente».
La fábrica tendrá un costo de 1.200 millones de dólares y se constituiría en la tercera planta de producción de celulosa en territorio uruguayo, que se sumará a las que construyen la finlandesa Botnia y la española Ence, con una inversión de 1.800 millones de dólares, la mayor recibida en forma conjunta por este país.
