Hace 21 años que funciona el cementerio “Parque de la Concordia”. Once años más tarde aparecía “Pinar del Campanario”. “La competencia”, dijo Sorokin. Pero aclaró que no es una competencia “sana”. “Lo veíamos en los primeros años. Sentíamos que algo no estaba bien y por eso se lo planteamos en más de una oportunidad a los directivos de la otra empresa”, dijo a los cuatro periodistas presentes, incluyendo a DIARIOJUNIO.
Buscando por Internet, encontraron el artículo 22º del Código Argentino de Comercio: la prohibición al clero de ejercer actividad económica o comercial. “Si el Estado les prohíbe, es porque el Estado les da soporte económico todos los meses que proviene ¿de dónde? De los impuestos que pagamos todos”, aseguró.
Más adelante, el propietario del cementerio parque dijo que la competencia es “doblemente desleal” porque evaden impuestos. “Todos los parques que hay en el país están obligados a pagarlos. Éste sería el único que no los paga”, señaló. Y explicó que el CUIT del Cementerio Pinar del Campanario, otorgado en 2001, que no está exento de pagar Ganancias, IVA, etc. no lo utilizan para imprimir los papeles de comercialización. En cambio, utilizan el CUIT del Obispado, otorgado en la década del 60, que está libre de impuestos dado que el culto está exento para sus actividades específicas.
Asimismo, indicó que apelaron a la Ley de Defensa de la Competencia. Por ello, presentaron un escrito en el ministerio de Economía, donde funciona la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia. Luego de dos semanas, el 2 de noviembre tuvieron que ir a una audiencia de ratificación a acreditar la sociedad anónima y la identidad de los directivos. “En la audiencia ratificamos todo lo escrito y ampliamos”, dijo Sorokin. Actualmente esperan que se corra traslado a la parte acusada y ver que descargo hace. “Si ese descargo satisface a la comisión, se cierra el expediente, y si no le satisface, prosigue con seguramente alguna sanción que desconozco”, explicó.
Aunque no hicieron ninguna denuncia en la AFIP, Sorokin aseguró que al cementerio del Obispado llegó una requisitoria del organismo. Por lo que descuenta que actuaron de oficio debido a la repercusión que tuvo la noticia. Asimismo, dijo que no acudieron a la Justicia para “no chocar” con el Obispado. “Lo que pretendemos es poner las cosas en regla para competir en forma normal, con calidad, con servicios, pero no con cosas que tienen al alcance ellos pero nosotros no”, manifestó.
Sorokin entiende que también habría un “abuso de poder” según la ley de Defensa de la Competencia. “Esto hay que entender que está muy vinculado a la parte religiosa. Utilizando la espiritualidad mayormente católica, promete una cosa que nadie puede comprobar. No puedo vender Coca Cola y competir con el que vende Pepsi y decir que el que tome Coca Cola va al cielo. El que vende Pepsi no lo puede decir y además no es comprobable, no es tangible”, indicó.
Más adelante aseguró que el primer paso “mal dado” fue la excepción que se le otorgó para instalar un cementerio en la zona norte. El código de uso de suelo en esa zona sólo permite actividades relacionadas con el turismo. Dos intendencias negaron el permiso pero el ex intendente Juan Carlos Cresto lo autorizó.
El empresario indicó que en otros lugares del país, los propietarios que compiten entre sí se reúnen periódicamente. “Acá fue imposible, nunca pude tener una reunión con ellos. Me siento discriminado, lo hemos intentado infinidad de veces y nunca lo hemos logrado”, dijo. Incluso repartió copias de una carta donde el Nuncio Apostólico, Adriano Bernardini, le responde que la única persona que puede dar una respuesta es el obispo de Concordia, Luis Collazuol. “Con lo cual se saca la responsabilidad de encima. El obispo después de este evento podría haber, él o algún secretario, haberse conectado con nosotros. Pues no”, manifestó.
Por otra parte, recalcó que no se trata de un cementerio de congregación como el que funciona en Paraná que depende del Obispado. “Tiene cinco panteones y algunos nichos para enterrar a los curas, no para abrirlo al comercio, al mercado”, señaló. Asimismo, la esposa de Sorokin remarcó que la actividad comercial está dada por la existencia de un departamento de marketing y ventas, de llamados telefónicos y de publicidad en medios radiales y escritos.
En otro tramo de la conferencia, el empresario dijo que el único político que se interesó en el tema fue el presidente del Concejo, Mariano Giampaolo. “A través del facebook me dijo que iba a hacer una investigación interna en la municipalidad, en catastro o no sé donde. Me dijo a través de un mail: ‘estoy paralizado con las cosas que me decís’”, señaló.