El biodiesel es un biocombustible líquido producido a partir de aceites vegetales y grasas animales, con la soja y el girasol como las materias primas más utilizadas. Es, básicamente, un derivado verde para el corte con gasoil.
Hasta hoy, el gobierno nacional había restringido su uso a un 5% pero mediante resolución de la Secretaría de Energía de la Nación se anunció que aumentará el cupo para la mezcla con gasoil a las petroleras. Estas últimas son las principales clientas de las plantas productoras de gasoil.
En todo el país, son 25 las pequeñas y medianas empresas que producen biodiesel para destinarlo al corte con gasoil. Tres de ellas están radicadas sen Entre Ríos, el resto se distribuyen entre Santa Fe, La Pampa, San Luis y el cordón agroindustrial en torno a la producción de soja.
“Cuando la mezcla era con el 10%, trabajábamos a full. Luego bajamos al 5% y estuvimos en un 50% de producción. Ahora con el 7.5% nos recuperamos un poco” contó Matías Bolzán, integrante de Grupo Bolzán y vicepresidente de BioNogoyá, una de las tres pymes entrerrianas productoras de biodiesel.
La medida del gobierno nacional, aún no publicada, incorpora a las grandes exportadoras que producen para exportación, a diferencia de las pymes que lo hacen para el corte nacional. La mayoría de esas exportadoras son las que pueblan el cordón sojero de Rosario, con una salida directa a los mercados internacionales.
La producción de biodiesel incluye el aceite de soja que, en el caso de Bolzán, es comprado y luego transformado para ser enviado a las petroleras. Así, YPF y Shell, dos de los clientes de la empresa entrerriana, acceden al producto para concretar la mezcla.
Sobre el impacto de la nueva medida, Bolzán aseguró que “se tendría que haber tomado hace 4 meses para efectivamente evitar la escasez que hoy vivimos”.
Consultado sobre cuándo podría verse el resultado en los surtidores, explicó que “el gasoil en Argentina es el más barato de la región. Las petroleras ahora aumentan automáticamente el corte, pero el tema va a ser logístico, porque son más camiones que van a tener que cargar el biodiesel y el combustible”.
“Creo que hasta dentro de un mes, mediados de julio más o menos, vamos a sentir la escasez. No es sencilla la distribución” agregó.
La incertidumbre sobre el precio del combustible también sobrevuela ahora, ante el anuncio. Para Bolzán, sin embargo,no debería aumentar el precio en surtidor. “El barril criollo es más barato que el barril importado. La salida del biocombustible es más barata que importar más gasoil”, aseguró.
