El pedido de informes fue presentado por el edil Ricardo Larocca (UCR), quien fue acompañado por Wdowiak. Entre los considerandos se señala que: el 15 de agosto de 1997 se celebró un contrato entre la firma y la municipalidad, que fue ratificado el 22/04/99, por el cual la concesionaria asumió diversas obligaciones. En la parte resolutiva se pide que se informe:
1) Cantidad de etapas de inversión ejecutadas por la firma VERTER SA conforme lo pactado en la cláusula 6º del contrato.
2) Si la concesionaria mantiene vigente el seguro destinado a garantizar las instalaciones durante el tiempo que dure la concesión. Detalle: empresas aseguradoras, montos del seguro, fecha de cobertura de las pólizas, etc.
3) Si la concesionaria ha contratado los seguros exigidos en la cláusula 12º: a) Seguros previstos por la Ley de Riesgo de Trabajo; b) contra incendios y riesgos adicionales y c) responsabilidad civil hacia terceros, etc.
4) Si la concesionaria dio cumplimiento a la construcción de la planta de efluentes prevista en la cláusula 17º. En caso positivo, si la misma se encuentra habilitada y si presentó planos de infraestructura (cloaca/desagües). En caso negativo, informe que acción llevó cabo el Ejecutivo para exigir su cumplimiento.
5) Informe cantidad de proyectos aprobados y ejecutados dentro del predio termal, indicando fechas y superficie comprometida.
6) Informe estado de deudas de las tasas municipales a cargo de la concesionaria.
7) Cantidad de boletos vendidas por la concesionaria desde la concesión hasta la presente, discriminadas por años, etc.
Cierre dominical
Luego de leerse el proyecto en el recinto, la concejal Mónica Galli (PJ) se opuso abiertamente, calificandolo como “caprichoso”, debido a que perjudicará a los turistas que se dirijan al Lago, a las Termas o a la Tortuga Alegre. “Se abastecen los domingos en el hiper porque no les da el presupuesto para ir a una casa de comidas o a un restaurant. Necesitan abastecerse del hiper, llevar a los chicos a los juegos”. Además, aseguró que la gente que trabaja durante la semana “aprovecha los domingos para hacer sus compras”.
También llamó a escuchar la opinión de los trabajadores. “Porque si a mí mi patrón me dice, ‘te pago doble por trabajar los domingos’, yo los voy a trabajar, por cuestiones personales mías. No porque el Concejo Deliberante haga un proyecto porque se le antoja cerrar el hipermercado”, expresó.
Wdowiak se manifestó sorprendido por las aseveraciones de una “militante social”, contrarias a los intereses de los trabajadores, según expresó. “Simplemente invitamos a una reunión a los actores principales: los comerciantes, los representantes de los empleados (CEC) y los representantes de esos comercios (CICS)”, expresó.
El edil vecinalista aseguró que consultó a los empleados del hipermercado y del supermercado Modelo. “Todos, por unanimidad, han bregado para que hagamos algo en pos de lograr el cierre dominical porque no tienen un salario doble. Hay gente que hace cinco años que no tiene un fin de semana para compartir con su familia”, añadió.
Luego Wdowiak añadió, “no es lo mismo descansar un domingo que un lunes; cuando los hijos van a la escuela, cuando el marido o la mujer tiene otro trabajo. La actividad propia de la ciudad se mueve en un sentido distinto a lo que es un domingo, donde uno tiene ofertas para disfrutar que se desarrollan solo los fines de semana”.
El debate amenazó con salirse de cauce, cuando la edil, entre otras cosas, dijo que Wdowiak traía “mandados encargados por sus amigos”. Martín Santana (PJ) sugirió dejar de lado al hipermercado Norte, e invitar a los representantes del CICS y a los dirigentes del CEC, para interiorizarse sobre la iniciativa.
Ricardo Larocca (UCR) manifestó su preocupación porque el Concejo únicamente se preocupa del empleado de comercio. “Están los panaderos, que comienzan a trabajar de madrugada los domingos. Si vamos a ser justos con los trabajadores, hay que cerrar todos los negocios que no sean esenciales”. También dedicó un párrafo a la Iglesia. “No se contempla a la minorías, por quienes descansan los sábados”, indicó.
“En realidad, quienes presionan por esto son los dueños de los comercios para poder descansar ellos”, expresó. Sugirió que el descanso sabatino o dominical se implemente dos veces al mes, para permitir la rotación de los empleados. “Además posibilitaría trabajar a estudiantes que necesitan trabajar para costearse sus recursos”, añadió.